La OCU se posiciona ante el polémico uso del Nutriscore

El Nutriscore ha sido adoptado por multitud de países de la Unión Europea, entre ellos España y ha habido polémica al respecto. Este etiquetado frontal califica los alimentos procesados de la A a la E, mostrando de manera sencilla cómo de nutritivo es un alimento. 

Ha habido dudas al respecto, dado que sus valores se centran en la cantidad de proteínas, azúcares, grasas y fibra que se puede encontrar en cada envase. Para zanjar esta cuestión, la Agencia Internacional de Investigación sobre el Cáncer (IARC) de la Organización Mundial de la Salud (OMS) y la OCU han reconocido la validez de este sistema.

Esto se debe a que han salido nuevos datos que muestran el Nutriscore como una opción sencilla y válida de calificación. Además, que esté presente en toda la Unión Europea sirve para unificar conceptos en el ámbito alimenticio.

Para la OMS, este tipo de etiquetado sirve para promover dietas saludables al facilitar la interpretación de la información nutricional. Los consumidores pueden mejorar su alimentación al tener un indicador tan claro y visible en los productos que compran.

Ha pasado los filtros de la OMS en ese sentido, dado que el Nutriscore cumple los requisitos de uniformidad, regulación, revisión e información del producto. Además, la información es más accesible, la cual es una de sus mejores características.

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La IARC ha apoyado este etiquetado gracias a los resultados de un informe. Han llegado a la conclusión de que el Nutriscore puede reducir el riesgo de cáncer relacionado con la dieta.

La OCU también está a favor del Nutriscore. De hecho, ellos mismos cuentan con la aplicación OCU Market, que informa del valor nutricional de los alimentos que compramos y consideran que el etiquetado realiza una labor similar, aunque también podemos encontrar otras apps.

Ambas organizaciones abogan por la inclusión de manera total en la Unión Europea. Hay países que todavía no lo han adoptado, pero con los informes y entes que lo apoyan, no debería pasar mucho tiempo hasta que sea un sistema generalizado.