Perder peso sin hacer dieta, según la ciencia: 11 trucos que recomiendan los expertos

Contar calorías es el mantra que escucha todo aquel que haya iniciado una dieta. Sin embargo, esta no es la única forma —quizás tampoco sea la mejor— de perder peso. 

No hay que obsesionarse por lo que se ingiere y ponerse a régimen para adelgazar, ya que también hay otras formas de hacerlo. Muchas propuestas animan a incorporar pequeños gestos y hábitos a tu rutina, que te ayudarán a bajar los kilos que marca la báscula. 

Si eres incapaz de seguir una dieta, quizás esta fórmula se ajuste más a tus expectativas. A continuación, te contamos 11 formas de perder peso sin pasar por un control estricto de lo que comes. 

Reduce al máximo el consumo cotidiano de azúcar

Cuando se trata de azúcar, sí es mejor contar y medir. Muchos de los alimentos que compramos e ingerimos en el día a día llevan azúcar, sin que seamos conscientes de ello. Un clásico ejemplo son algunos de los cereales de fibra que encontramos en el supermercado: también lo incluyen. Por eso, cuando selecciones los productos de tu cesta, echa un vistazo a los ingredientes. Como es aconsejable, puedes comer azúcares naturales, pero siempre debes evitar los refinados. 

Es preferible que te comas las piezas de fruta, en vez de bebértelas en zumos y batidos

Según datos de la firma de deporte Decathlon, 2 naranjas contienen unas 110 calorías. Normalmente, cuando comes fruta, no tomas 2 piezas de la misma, sino que intercalas variedades a lo largo del día. Sin embargo, en un zumo incluirás, como mínimo, un par de naranjas. Lo mismo ocurre con los batidos, en los que añadirás una combinación de frutas. 

Intenta beber agua media hora antes de comer

Si quieres adelgazar, beber agua media hora antes de comer puede ayudarte a conseguirlo. Según un estudio, esta fórmula puede incrementar la pérdida de peso en un 44% en 3 meses. 

Comer despacio ayuda a impulsar las hormonas del adelgazamiento

La leptina es la hormona que adelgaza. Y comer despacio ayuda a potenciarla, según Healthline. Además, ingerir tus alimentos tranquilamente, sin prisa, te hará sentirte saciado. Normalmente, engordan más las personas que comen más rápido, habiendo una correlación entre el peso y la velocidad de ingesta. 

Adelanta 1 hora el momento de la comida y la cena

Los españoles somos conocidos por tener horarios tardíos, al contrario que lo que ocurre en la mayoría de países europeos. Las comidas oscilan entre las 14.00 y las 15.00 horas y, las cenas, entre las 21.00 y las 22.00 horas. Sin embargo, estos tiempos no te ayudarán a reducir el número de kilogramos de la báscula. Según Esquire, almorzar a las 13.00 y a las 20.00 horas, respectivamente, ayuda a adelgazar, ya que irte a dormir con la barriga llena, no es lo óptimo. 

Deja el coche aparcado si vas al trabajo, a hacer la compra o a quedar con amigos

Una forma muy sencilla de mejorar tu peso es moverte más. En vez de desplazarte a todos los sitios en coche, prueba a hacer más trayectos andando. Caminar al trabajo es una alternativa ideal, aunque no todo el mundo puede hacerlo. Si es tu caso, aprovecha otras oportunidades: recados, compras, encuentros con amigos, etc. La bicicleta es también más que recomendable para moverte de un lado a otro. 

Escaleras vs. Ascensor: elige la primera opción

Como ocurre cuando andas o usas la bicicleta, puedes incorporar el hábito de subir y bajar en escaleras a tu rutina. Es un pequeño esfuerzo que, sumando trayectos, puede ayudarte a marcar la diferencia. 

Evita comer con distracciones: deja el móvil y las pantallas en pausa

Comer sin prestar atención a lo que tienes en el plato es un error que te llevará a querer más cantidad. Si estás distraído con la televisión, el móvil, conectado a un videojuego o haciendo otras tareas, no sabrás si has comido mucho o poco. Eso hará que consumas más. Según un estudio de 'The American Journal of Clinical Nutrition', la gente que está distraída durante el almuerzo ingiere un 10% más de alimentos. 

20 minutos al día de sol te ayudarán a mejorar tu figura

La falta de vitamina D está relacionada con el sobrepeso y con la acumulación de grasa en la tripa, según Esquire. No es que tomar el sol vaya a ayudarte a adelgazar, pero sus efectos sí pueden contribuir a mejorar tu figura. Por ello, es recomendable una exposición solar moderada, de unos 20 minutos.

Duerme media hora más al día

Aquí la leptina, la hormona que adelgaza, vuelve a entrar en juego. Si no duermes bien, si te faltan horas de sueño, esta puede verse alterada, según Alimente. 

El estrés potencia el hambre y los caprichos

Además de que la leptina puede verse perjudicada por la falta de sueño, el estrés también afecta a otra hormona. Los nervios aumentan el cortisol. Y, al juntarse ambos factores, no solo tendrás más hambre, sino que querrás darte más caprichos.

Este artículo fue publicado en Business Insider España por Carlota G. Velloso.