La subida de los precios de la energía, agravada por la invasión rusa de Ucrania, ha provocado un descontento social generalizado que el Gobierno ha tratado ahora de aplacar.

A mediados de mayo ya vimos cómo el Gobierno limitó el precio del gas para rebajar la factura eléctrica de los hogares, las empresas y la industria. Este mecanismo excepcional que acordó la UE con España y Portugal estableció una rebaja de los 210 € de los anteriores meses hasta los 130 €. 

Sin embargo, según informa la OCU, el precio de la electricidad durante el mes de junio se ha situado en 211,8 euros/MWh, lo que se traduce en unos 102,65 € de más en la factura media de un hogar con la tarifa PVPC (la tarifa de luz por horas) en junio, ya aplicada la reducción.

Con esto sobre la mesa, es más que obvio que de poco ha servido esta supuesta mejora que iba a calmar las aguas. Y es que, parece que estas medidas, como la rebaja del IVA en la factura eléctrica al 5 %, la prórroga de los descuentos del bono social (60% y 70%) o la rebaja del Impuesto de la Electricidad al 0.5%, han caído en saco roto.

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Ahora bien, el gran problema que reside bajo todo esto es que hasta entonces el precio de la luz se fijaba de forma diaria en una subasta eléctrica. Con este tope del gas, la cosa cambia. Al precio debemos sumarle una compensación a estas empresas de gas, que, lógicamente pagamos cada uno de nosotros en la factura mensual. 

 "Al mismo tiempo, el gas de los mercados internacionales también está subiendo y la compensación que se tiene que hacer es mayor a la de la prevista por el Gobierno", incide Carlos Balado, profesor OBS Business School.

Otro gran motivo por el que estos 15 días no hemos visto buenos resultados son las altas temperaturas a las que nos hemos expuesto.

El Gobierno pide paciencia. "Hay que dar tiempo a este mecanismo. No se puede evaluar una política de este calado solo con su primer día de ejecución. Vamos a dar tiempo, pero estamos actuando donde está el problema", ha explicado la ministra de Industria y Comercio, Reyes Maroto.