Por qué no debes tomar bebidas azucaradas con comidas ricas en proteínas

Un equipo de científicos del Grand Forks Human Nutrition Research Center (Estados Unidos) ha llevado a cabo un estudio que sugiere que, si no quieres engordar, no es recomendable tomar bebidas azucaradas con comidas ricas en proteínas. De acuerdo con la investigación, publicada en BMC Nutrition, esta combinación puede afectar negativamente el balance energético, alterar las preferencias alimentarias y hacer que el cuerpo almacene más grasa. 

Para llevar a cabo el estudio, los investigadores reunieron a un grupo de 27 adultos con peso saludable (13 hombres y 14 mujeres), con una media de edad de 23 años. Los participantes acudieron al laboratorio dos jornadas durante 24 horas, una para tomar dos comidas (desayuno y almuerzo) con un 15% de proteínas después de un ayuno nocturno, y otra para tomar dos comidas con un 30% de proteínas tras el ayuno nocturno.

Todas las ingestas se componían de los mismos alimentos y proporcionaban 17 g de grasa y 500 kcal. En una de las comidas tomaban una bebida azucarada y en la otra no.

En concreto, los científicos descubrieron que mezclar bebidas endulzadas con azúcar con comidas altas en proteínas disminuye un 8% la oxidación de las grasas, que es el desencadenante de la descomposición de las moléculas de grasa.

Sus experimentos revelaron que al tomar una bebida azucarada con una comida con un 15% de proteínas, la oxidación de las grasas disminuye una media de 7,2 g, y con una comida con un 30% de proteínas baja una media de 12,6 g. 

"Descubrimos que aproximadamente un tercio de las calorías adicionales proporcionadas por las bebidas azucaradas no se queman, el metabolismo de las grasas se reduce y se necesita menos energía para metabolizar las comidas", explica la Dra. Shanon Casperson, autora principal del estudio. "Esta disminución de la eficiencia metabólica puede 'preparar' al cuerpo para almacenar grasas".

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No obstante, este no es el único problema para adelgazar que tiene combinar bebidas azucaradas con comidas ricas en proteínas. Según señala la Dra. Casperson, también hace que aumente el deseo de comer alimentos sabrosos y salados durante las cuatro horas posteriores a la ingesta, lo que dificulta el control del apetito y hace engordar. 

Por lo tanto, si no quieres ganar unos kilos de más, lo mejor es que moderes el consumo de bebidas endulzadas con azúcar y que evites tomarlas junto con comidas altas en proteínas.