Qué significa que un alimento sea orgánico, y qué ventajas tiene
Existen muchas formas de comer sano, y una de ellas es consumir alimentos orgánicos. ¿Qué son exactamente?
Los alimentos orgánicos se han cultivado de manera natural. Son más recomendables que los industriales, pero también más caros. Es un término que confunde a muchas personas, porque orgánico no significa, necesariamente, más sano. Al menos no en términos alimenticios.
En los supermercados podemos encontrar muchos tipos de alimentos: ecológicos, biológicos, sostenibles, etc. Entre los más buscados están los alimentos orgánicos.
El término se aplica a la forma en que se producen. Un alimento orgánico no ha sido tratado con productos químicos artificiales. Según explica la nutricionista Mia Syn en la web de salud verywellfit, estos produtos varían según se trata de alimentos de origen animal o vegetal.
Qué son los alimentos orgánicos
En el caso de la carne, leche, huevos, y otros alimentos de origen animal, son orgánicos si los animales no han sido tratados con antibióticos ni hormonas del crecimiento.
Si hablamos de frutas, hortalizas, y otros alimentos vegetales, el término orgánico se refiere a que no se han usado pesticidas, herbicidas, fertilizantes sintéticos, lodos de depuradora, irradiación o ingeniería genética.
Por tanto, podemos decir que los alimentos orgánicos se han producido a la manera tradicional. Esto hace que crezcan más lentamente, que se produzcan en menor cantidad, o que muchos haya que desecharlos por enfermedades o plagas que no se pueden tratar sin productos químicos. Es la razón de que sean más caros, porque el cultivo cuesta más tiempo y cuidados, y se produce en menor cantidad.
Otro "efecto secundario", es que suelen ser más pequeños, y tener formas más feas, en el caso de los vegetales, al no haber usado "potenciadores" como las hormonas de crecimiento o fertilizantes químicos.
Los alimentos orgánicos no son más "ligeros", en el sentido alimenticio. Tienen las misma calorías y valor nutricional que los alimentos cultivados de forma industrial. Si te comes tres filetes y cuatro huevos todos los días acabarás engordando y sufriendo diversos problemas de salud, por muy orgánicos que sean.
Pero hay estudios que han comprobado que los alimentos orgánicos suelen tener más nutrientes y vitaminas, al no acelerar su crecimiento.
También son más sanos, y esta es su principal ventaja, porque no contienen productos químicos. Hay estudios que demuestran que los pesticidas, herbicidas, metales pesados y otros químicos que se usan en los alimentos industriales pueden ser cancerígenos, o dañar el hígado.
Los antibióticos y otras sustancias que se suministran a los animales pueden producir efectos secundarios y hacer que las bacterias y virus se vuelvan inmunes a ellos.
Finalmente, hay que valorar que también que son menos agresivos con el medio ambiente, al no usar pesticidas, herbicidas y otros productos químicos dañinos para la Naturaleza.
Cuidado con las categorías de orgánicos
En función del país donde vivas, encontrarás diferentes categorías de productos orgánicos. Por ejemplo 100% orgánico, no deja lugar a dudas. Los que solo son orgánicos "a secas" deber serlo al menos en el 95% de su composición. También hay productos hechos con ingredientes orgánicos, que deben contener al menos un 75% de orgánicos.
En resumen, los alimentos orgánicos son más sanos y más respetuosos con el medio ambiente, así que merecen la pena. Pero también hay que valorar que son más caros. Un término relativo, cuando se trata de alimentarse bien y cuidar la salud y el planeta.
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