Logo Computerhoy.com

El sencillo truco psicológico para ser mejores al realizar cualquier tarea

Hombre trabajando con la cabeza tumbada en el ordenador

Depositphotos

Si te cuesta terminar una tarea, es muy probable que el problema sea sencillamente que no sabes exactamente cuándo terminará la misma. Parece una tontería, pero tiene una explicación psicológica.

A nadie le gustan los plazos a la hora de ejecutar una tarea o trabajo, sobre todo si detrás de ellos hay un jefe exigente que no nos quita ojo de encima listo para actuar si no llegamos a tiempo a la fecha establecida.

Pero, y si te digo que aunque sean estresantes, los plazos resultan ser un excelente motivador que nos ayuda a completar las tareas más rápido y de una forma mucho más eficiente.

Esto no solo afecta al ámbito laboral, se puede aplicar a casi cualquier faceta de nuestra vida. Por ejemplo, no es lo mismo marcarse como objetivo estar en forma, que fijarse el objetivo de llegar preparado para correr y finalizar una carrera concreta. 

El segundo resulta mucho más motivador al tener una fecha de concreta de finalización, el primero es una idea difusa.

Así lo demuestra un estudio publicado por la Universidad de Tel Aviv del que se hizo eco Bigthink, en el que se pidió a 64 estudiantes universitarios que realizaran una series tareas complejas divididas en bloques con una recompensa monetaria para aquellos que las superaran el proceso con una valoración por encima de un baremo establecido.  

Los participantes se dividieron en dos grupos y completaron 10 bloques de 240 ensayos, haciendo un total de 2.400 ensayos, pero mientras que a un grupo se le dijo que el experimento estaba dividido en bloques y se les dio información sobre cuántos bloques del total habían completado durante todo el proceso, al otro grupo no. 

Ninguno de los grupos recibió evaluación alguna mientras ejecutaban el trabajo, aunque se les preguntó por su nivel de cansancio, aburrimiento y energía al finalizar algunos de los bloques para calcular un indicador de fatiga.

El grupo que recibió información de cuánto habían progresado en el experimento consiguió un mayor nivel de rendimiento, velocidad y precisión; algo que aumentó de forma considerable conforme llegaba el final del mismo, lo que sugiere que saber cuándo terminará una tarea hace que sea más fácil completarla. 

El grupo que recibió comentarios también necesitó menos descansos que el grupo que no recibió información alguna, pese a que estos no indicaron sentirse menos fatigados.

El experimento se repitió con un mayor número de bloques, aumentando el número de pruebas hasta las 2.880. Y como en el primer experimento, con mismos resultados. El grupo que no sabía cuándo finalizaría el trabajo tomó un mayor número de descansos, tardó más tiempo y mostró sentirse mucho más fatigado.

 

¿Por qué hacemos mejor el trabajo cuando sabemos que una tarea va a terminar? Si somos conscientes de que una tarea tediosa está casi terminada, nos acerca a otras actividades más placenteras, lo que nos motiva a terminar antes y mejor lo que estamos haciendo.

Además, si no tenemos idea de cuánto tiempo más vamos a dedicarle a una tarea, es más difícil que pongamos toda nuestra energía en ella; mientras que si sabemos que el final está cerca nos esforzamos al máximo al ser conscientes de que tendremos energía suficiente para terminarla.

El estudio deja claro que el conocimiento de cómo está progresando una tarea puede tener un impacto positivo tanto en la cantidad de esfuerzo que dedica a ella como en la calidad y cantidad del mismo, por lo que si realmente quieres quitarte ese aburrido trabajo de encima, lo mejor es marcarte una fecha para terminarlo.

Descubre más sobre , autor/a de este artículo.

Conoce cómo trabajamos en Computerhoy.

Etiquetas: Salud, Trabajo