El Sol nos da la vida pero también nos la quitará, y es que en un futuro, muy lejano, el Sol va a morir, enfriándose, pero antes engullirá a la Tierra.

No es catastrofismo, es ciencia, y no obstante la sonda Gaia de la Agencia Espacial Europea ya sabe cuándo morirá nuestro Sol, y por lo tanto también cuándo desaparecerá la vida de la Tierra.

Y es que la sonda espacial europea ha señalado que el Sol está casi a la mitad de su vida útil y cuando llegue al final se hinchará e destruirá nuestro planeta, pero por suerte esto no pasará hasta al menos unos 5000 millones de años.

No obstante, Gaia ha determinado que el Sol cuenta con 4570 millones de años y analizando su composición ha señalado cómo evolucionará en el futuro. En el camino hacia su desaparición comenzará a alrededor de los 10-11.000 millones de años de edad cuando se convierta en una gigante roja y aumente significativamente de tamaño, llevándose a la Tierra por delante.

A partir de aquí, cuando ya nos haya engullido, el Sol seguirá hacia su inevitable muerte terminando como una enana blanca tenue y fría.

Por otra parte el astrónomo francés Orlagh Creevey quien trabaja con Gaia ha señalado que “es importante que encontremos estrellas similares a nuestro Sol para que podamos entender cómo encaja en el universo”.

Añade que “es una fuente de cierta ironía que el Sol sea nuestra estrella más cercana y más estudiada pero su proximidad nos obligue estudiar con telescopios e instrumentos completamente diferentes de los que usamos para observar el resto de las estrellas del universo”.

“Al identificar estrellas parecidas al Sol, pero esta vez con edades similares, podemos cerrar esta brecha observacional”, añade.