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Encuentran trazas de 1.200 especies de insectos en las bolsas de té y otras hierbas que se venden en los supermercados

Encuentran trazas de 1.200 especies de insectos y otros invertebrados en las bolsas de té y hierbas que se venden en tiendas

Resulta que las bolsitas de té están llenas de microscópicos restos de insectos... ¿Debemos preocuparnos?

Biólogos de la Universidad de Trier, en Alemania, se han mostrado sorprendidos por la gran cantidad de trazas de insectos que han encontrado en las bolsas de té y otras hierbas de marcas convencionales que venden en los supermercados.

Analizando únicamente 40 bolsitas de hierbas de diferentes marcas, han encontrado un total de 3.264 invertebrados, que pertenecen a más de 1.200 especies diferentes.

En una única bolsa de la variedad té verde, han rastreado nada menos que 400 especies de insectos. Entre los restos de ADN encontrados hay arañas, cucarachas, ácaros, moscas, mariposas, mantis y muchos más. ¿Supone esto una violación de alguna ley de Sanidad, y representa algún peligro para la salud?

 

Estas trazas de ADN y otros restos las dejan los insectos cuando se posan, se alimentan, o ponen huevos en planta del té y otras hierbas. La razón de que haya tantas trazas de invertebrados es por la manera en que se cultivan las hierbas que consumimos en forma de bebida.

Según explica el genetista medioambiental Henrik Krehenwinkel en Science Alert: "al moler las hierbas, el ADN de todas las partes del campo donde se cultivan (probablemente incluyendo algunos bichos enteros y sus huevos) se conserva, se mezcla y se extiende por todo el lote".

¿Supone eso un motivo de preocupación? Pues la verdad es que no. Al ser un alimento orgánico, es normal que las hierbas acumulen restos de ADN de invertebrados, que por otra parte son restos orgánicos que no presentan problemas para la salud.

La noticia no es tanto la presencia de estas trazas, que ya se sabía, como la inmensa cantidad y variedad de ellas. "Lo que realmente me sorprendió fue la gran diversidad que detectamos", explica el genetista.

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Analizando estas trazas de ADN medioambiental (eDNA) en las hierbas del té, menta, perejil, y otras, los científicos obtienen numerosa información: desde la especie del insecto, hasta la zona geográfica donde se cultivó esa hierba.

Esta sorprendente variadad va a animar a muchos genetistas a estudiar los insectos a través de las hierbas secas, para prevenir cosas como las plagas: "El material vegetal seco parece adecuado como herramienta novedosa para controlar los artrópodos y las interacciones artrópodos-planta, detectar las plagas agrícolas e identificar el origen geográfico de la materia vegetal importada".

Por tanto no hay que preocuparse porque las hierbas que venden en los supermercados tengan trazas de miles de insectos, aunque intenta no pensar en ello mientras te bebes tu taza de té o manzanilla...

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Etiquetas: Alimentación, Salud