Trucos caseros muy simples para combatir el resfriado y el dolor de garganta
La llegada del frío viene acompañada de los típicos resfriados, dolor de garganta, y problemas más serios, como la gripe. Estos consejos caseros te ayudarán.
Los cambios bruscos de temperatura que se producen en otoño, la lluvia, o las diferencias de temperatura entre el día relativamente caluroso, y la fría noche, pueden provocar resfriados, dolor de garganta, y otras dolencias típicas del otoño.
Si tienes tos, mocosidad, dolor de garganta, malestar general, y los síntomas típicos de una afección respiratoria, es el momento de actuar.
Vamos a ver algunos trucos caseros muy simples para combatir el resfriado, la gripe, o el dolor de garganta.
Estos consejos han sido abalados por los médicos, así que merece la pena ponerlos en práctica.
Además no exigen mucho esfuerzo, ni gastar mucho dinero.
Tomar sopa de pollo y vegetales
La sopa caliente no solo reconforta cuando padecemos un resfriado o hace frío.
Un estudio comprobó que también reduce el movimiento de un tipo de células blancas de nuestra sangre que combaten las infecciones.
Al moverse más lento, se concentran en las zonas del cuerpo que sufren la infección, con más eficacia.
Lleva calcetines mojados
Este truco suena muy extraño, pero lo recomienda la revista Best Health.
Se trata de llevar calcetines mojados. Parece una contradicción cuando estás resfriado, pero tiene una explicación: los pies mojados incrementan la circulación y atraen más sangre a los pies. Esto reduce la fiebre y alivia la congestión.
Pero no se trata de ponerse unos calcetines mojados, sin más.
Best Health aconseja lavar los pies con agua caliente, mojar unos calcetines finos de algodón en agua fría, y ponérselos. A continuación poner encima unos calcetines gruesos de lana.
Beber muchos líquidos
Con la gripe y los resfriados se pierde mucho agua por los estornudos, sudoración, mocosidad, etc.
Beber líquidos, ya sea agua, te, zumos, etc., no solo repone esos líquidos, sino que aporta energía a nuestro organismo para combatir la infección.
Aspirar vapor caliente
Es un remedio muy conocido. Se trata de cocer agua hasta que comience a salir vapor, y aspirarlo por la nariz con una toalla en la cabeza que también cubra el cazo de agua, para que el vapor no se escape.
La web ActiveBeat recomienda añadir al agua 2 cucharas de jengibre fresco troceado, o bien una cucharada de mentol, o algunas gotas de aceite de eucalipto.
Usar soluciones salinas
La web médica WebMD recomienda comprar un espray salino en la farmacia y hacer enjuagues por la nariz.
Es una solución eficaz para aliviar la congestión, y además combate las bacterias que se quedan entre la nariz y la garganta.
Tomar miel
La miel tiene probabas propiedades antibacterianas y antimicrobianas, así que va bien contra cualquier tipo de infección.
Pero además suaviza la garganta y reduce las ganas de toser, y posee nutrientes que refuerza el sistema inmunitario.
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Descubre más sobre Juan Antonio Pascual Estapé, autor/a de este artículo.
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