Así funciona el limitador de velocidad que ya es obligatorio en los coches nuevos, ¿qué deja hacer al conductor?
En unos años será imposible ver a un vehículo circular a más velocidad de la permitida en carretera, al menos en la Unión Europea. Llega el limitador de velocidad ISA.
Los muertos en carretera han vuelto a aumentar en los últimos años, y la DGT está dispuesta a hacer lo que sea para reducirlos.
El Parlamento Europeo aprobó una ley para que todos los coches nuevos fabricados a partir del pasado 6 de junio, incluyan el Asistente de Velocidad Inteligente, o ISA.
Se trata de un limitador de velocidad activo, es decir, que puede tomar el control de la velocidad del coche, si es muy alta. A partir de 2024 lo tendrán todos los vehículos.
Tal como explica nuestro compañero Aarón Pérez en Auto Bild, actualmente muchos coches llevan los dos sistemas que el ISA va a unificar.
Por un lado está el limitador de velocidad que ya incluyen vehículos de fabricantes como Toyota o Lexus, así como Volvo y Renault, que limitan la velocidad a 180 Km/h. En algunos casos, el conductor puede subir o bajar este límite. El vehículo dejara de acelerar si se supera esa velocidad. Sin embargo, es un sistema opcional que se anula pisando fuerte el acelerador.
Otra tecnología que llevan algunos coches es el sistema de reconocimiento de señales. Unas cámaras exteriores reconocen las señales, especialmente las de velocidad máxima, y las muestran en el salpicadero, para que el conductor las tenga en cuenta. Pero como el sistema anterior, es solo una tecnología informativa.
Llega el Asistente de Velocidad Inteligente ISA
El ISA lo que hace es unificar estas dos tecnologías en un único dispositivo, y al mismo tiempo, tomar el control del acelerador, si lo cree necesario. Es la gran diferencia: este sistema de alerta deja de ser pasivo e informativo, y pasa a ser activo.
Según explica Auto Bild, en un principio este asistente será desconectable, pero se volverá a activar tras parar y volver a arrancar el motor. Tiene, además, tres niveles de actuación.
En un Primer nivel, el ISA avisará de que estamos superando el límite de velocidad, gracias a su capacidad para leer las señales. Lo hará de forma visual y sonora, tanto en el cuadro de instrumentos como con una alerta auditiva, pero no actuará sobre la conducción.
En el Segundo nivel, si la velocidad sigue aumentando el ISA comenzará a intervenir. Puede endurecer el pedal del acelerador o avisar mediante una señal háptica en el pedal del acelerador de que estamos superando el límite. No obstante, en este nivel se podrá seguir acelerando si seguimos apretando con fuerza el acelerador.
Durante el Tercer nivelel coche toma el control del acelerador, adecuando la velocidad a las señales de tráfico o tipo de carretera. El conductor solo puede manejar el volante y el freno.
Queda por saber cuáles serán las velocidades que fijen esos niveles, y los márgenes que dejará la DGT antes de que el ISA tome el control.
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