Los turbocompresores eléctricos son un invento significativamente reciente que, aunque no estaban a la altura aún en términos de rendimiento, siguen evolucionando en busca de la excelencia. Una muestra de ello es el nuevo turbo eléctrico que ha patentado Porsche, una tecnología que promete menos lag y una mayor eficiencia.

En realidad, Porsche aún no lo ha patentado, pero ha solicitado la patente como informan desde Carbuzz. Este sistema se inspira en una configuración tradicional de doble turbocompresor, en la que se utilizan dos unidades más pequeñas para una repuesta más rápida, especialmente a bajas revoluciones.

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Así es el nuevo turbo eléctrico que ha patentado Porsche

En el concepto de la firma alemana se utilizan dos pequeñas turbinas de escape que operan por sí solas, sin conexión mecánica a un compresor. En su lugar, las turbinas pequeñas y sensibles alimentan los generadores. Luego, se usa un solo compresor grande en la admisión, accionado por un motor eléctrico.

El diseño también cuenta con una válvula de descarga que permite que los gases sean liberados más allá de las turbinas de escape cuando no se necesita energía, lo que permite una mayor eficiencia cuando se circula a velocidades de crucero.

Esta tecnología permite separar la velocidad de rotación del compresor del de las propias turbinas. Esto significa que hay presión de soplado de turbo a cualquier régimen de revoluciones siempre que haya energía eléctrica disponible que se almacenaría en una especie de batería, eliminando el problema del denominado turbo lag.

El diseño de Porsche permite el uso de un compresor grande con un mayor caudal para una mayor eficiencia sin la penalización habitual de una respuesta más lenta. Normalmente, los turbocompresores grandes son más lentos, ya que cuentan con turbinas más grandes que necesitan un mayor flujo de aire para acelerar, lo que significa que no hay ‘patada’ hasta subir de revoluciones.

Son varios los diseños de turbo eléctrico que se han confeccionado hasta la fecha. La tecnología se ha utilizado en la Fórmula 1 y también ha empezado a llegar a varios superdeportivos de calle- Incluso los supercargadores eléctricos son una realidad, como el que se encuentra bajo el capó del Mercedes-AMG E53.

Este artículo fue publicado en Autobild por Aarón Pérez.