El peligro de confiarse de las cajas de radares vacías de la DGT

A lo largo de nuestras carreteras existen multitud de radares pensados para que los conductores respeten los límites de velocidad y si no es así ponerles multas, unos radares que pueden ser fijos o móviles, y que pueden estar situados en distintas zonas, muchos de ellos dentro de cajas que ya de por sí imponen.

Sin embargo, en estas cajas puede o no haber un radar, y es que muchas se encuentran vacías, haciendo que el conductor se confíe pasando a alta velocidad a lo largo del mismo. Pero ahora la DGT avisa de que aunque algunas de estas cajas estén vacías sin ningún radar en su interior, esto podría cambiar en cualquier momento.

Y es que uno de los principales peligros de estas cajas de los radares vacíos es que ahora pueden estar vacíos sin existir un radar en el interior, pero quizás una semana después la DGT decida poner uno en el interior de la caja, con lo que confiarse en este aspecto es lo peor que puede hacer un conductor para evitar multas de velocidad.

Y es que nadie puede quejarse, porque la DGT siempre está avisando de multitud de radares y cambios en la legislación para evitar que te lleves una buena multa, y si bien ya dejó clara la estrategia de introducir cajas vacías sin radares en nuestras carreteras para que los conductores aminoren la velocidad, esto también puede tener una doble trampa.

Y es que si bien muchas de estas cajas de radares vacías están puestas para que no se sobrepasen los límites de velocidad, muchas conductores al conocer que no hay ningún radar en su interior, empiezan a omitirlas. La DGT aclara que puede cambiar los radares de sitio de forma periódica y que no haya un radar en una caja hoy, lo puede haber mañana.

De esta forma, no debes confiar en la información que veas en redes sociales sobre que una caja de un radar esté vacía, porque puede ser una información desactualizada.

Sentido común con los radares

Por otra parte, debes respetar los límites de circulación, las distintas señales de tráfico y la disposición de los radares, porque aunque una caja de radar esté vacía, puede existir cualquier otro radar escondido en esa misma zona para cazar infracciones.

Así que no confíes en las cajas de radares vacías de la DGT, porque es probable que, según las circunstancias, alguno pueda acabar incluyendo una sorpresa que pueda mandarte una buena multa.