Trucos infalibles para mantener un motor diésel libre de averías y hacer que dure muchos años

Mucho se ha escrito al respecto de los diésel. Esos motores que tantas alegrías nos dieron en los años 2000 y 2010. Por desgracia explotó el dieselgate y se descubrió que la mayoría de diésel emitían mucho más de lo que habían asegurado.

El diésel tiene pros y contras. En cuanto a sus ventajas, los motores modernos diésel tienen un consumo bajísimo con unas emisiones muy bajas, incluso de gases perjudiciales(gracias al añadido del AdBlue y las mejoras en los catalizadores).

En cuanto a sus contras está que el diésel ahora es más caro que la gasolina 95 por primer vez en la historia y que, en término medio, son motores más caros de arreglar y un poco más delicados que los gasolina. Por eso hoy te explicamos como mantener en buen estado tu motor diésel.

• Comprobar el nivel de aceite: el lubricante es siempre parte esencial del buen funcionamiento de un motor. Pero es que en un diésel, aunque su combustible lleve algo ya de por sí, resulta aún más importante. Debes poner uno de buena calidad y sustituirlo dentro de los plazos que te indique el fabricante. Y por supuesto, cuando lo hagas, has de poner también un filtro de aceite nuevo.
• Calentadores y filtros de partículas: son dos elementos propios del diésel cuyo mantenimiento también has de llevarlo a rajatabla. Los calentadores son a un diésel lo que las bujías a un motor de gasolina: van situados en los cilindros y, a diferencia de estas, en vez de provocar la chispa para que la gasolina comprimida explote y mueva los pistones, lo que hacen es que el gasóleo arda.
• Temperatura de trabajo y enfriamiento del turbo: has de saber que todo motor térmico está pensado para funcionar a una temperatura óptima y que en el caso de los diésel, esta tiende a tardar un poco más en alcanzarse. Lo ideal es que los primeros km los hagas a bajas vueltas. Y cuando llegues de un viaje largo, antes de apagar el motor déjalo un minuto en punto muerto enfriándose.
• Distancias cortas: otro truco muy sencillo y efectivo es evitar las distancias demasiado cortas a diario. Este tipo de trayectos cotidianos que suponen arrancar en frío y volver a apagar enseguida el motor, arrancarlo de nuevo... hacen envejecer prematuramente un diésel.
• AdBlue: repostar solo con un producto de calidad, no dejar bajo ningún concepto que este caduque.  Y, por supuesto, no apures demasiado para rellenar el tanque de AdBlue o generarás residuos y más riesgos de averías innecesarias. 

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Todos estos consejos son sacados de nuestra web amiga AutoBild, expertos en el mundo de la automoción desde hace más de 20 años, así que son consejos a tener en cuenta.

Es trabajo nuestro mantener el coche en buen estado, que con el aumento de los precios y la crisis de semiconductores, hacerse con un vehículo es más difícil que nunca.