Kodak ha presentado su primer smartphone IM5 en el CES
Atenea García
Kodak continúa luchando por seguir en el candelero en el mundo de la fotografía y para eso no le ha quedado más remedio que subirse al carro tecnológico con su primer teléfono inteligente, el iM5.
De Kodak, un viejo icono del mundo fotográfico, se esperaría un móvil que no defraudara en la cámara aunque adoleciera de otras capacidades. Pero según la revista digital, The Verge, Kodak no se ha complicado para hacer una cámara excepcional, ya que las cámaras traseras y delanteras del terminal no pasarían de ser simplemente "aceptables".
Sin embargo el propio comunicado de prensa de Bullit Group, el aparato se centra en dos aspectos fundamentales que han tenido en cuenta a la hora de fabricar y diseñar este smartphone; la simplicidad y la fotografía. "Este es un teléfono para los consumidores que aprecian el valor y el patrimonio de la marca Kodak". Afirmó Oliver Schulte, Ceo de Bullit.
En cuanto a las característica técnicas del dispositivo, el software del smartphone IM5 utiliza Android Kit Kat con una capa de personalización creada por Kodak y Bullit facilita la navegación para realizar acciones como tomar e imprimir fotografías.
El hardware está compuesto por un procesador MediaTek octa-core a 1,7 GHz, pantalla de 5 pulgadas con resolución de 720p, módulo RAM de 1GB y lo que más importa: una trasera de 13 megapíxeles y otra frontal de 5 megapíxeles que no innovan especialmente.
El Kodak IM5 viene preparado para el retoque de las fotografías ya que cuenta con un botón desde el que acceder a un programa integrado en el que se podrás elegir como preestablecido el retoque automático, el cual incluye una aplicación para poder imprimirlas de inmediato.
Además de acceso a Google Play, el Kodak IM5 agrega una tienda propia llamada Apps donde, dice la empresa, hay aplicaciones especialmente seleccionadas.
El precio de este teléfono rondará en Europa los 300 euros.
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