¿Morir de éxito? Quizá eso es lo que le está sucediendo a Apple, que según parece está perdiendo su hegemonía en el mercado de los smartphones. El que hasta hace poco ha sido el rey de los teléfonos inteligentes, ya tenía un claro y muy digno competidor, que ahora le ha superado, Samsung. Según los últimos datos del primer trimestre del año la compañía surcoreana, que todavía no había presentado su último smartphone estrella Samsung Galaxy S IV, obtuvieron el 32% de cuota de mercado frente al 28,8 % de 2012.

En los tres primeros meses de 2013, la compañía consiguió un resultado en cifras de aproximadamente 70 millones de smartphones, mientras que los de Cupertino se quedaron en unos discretos 37, 4 millones en el mismo periodo de tiempo. Por supuesto, este aumento de ventas se ha visto reflejado en sus beneficios,  6.400 millones; aunque en este apartado, los de la manzana siguen llevándose el primer premio con 9.500 millones de dólares.

Y dejando atrás las cifras, ¿a qué es debido este éxito? Mientras que Apple siempre ha apostado por posicionarse como una marca elitista con smartphones de alta gama, aunque son muchos los rumores que apuntan a que en breve dispondrá de un nuevo iPhone low cost con un precio inferior al habitual. Samsung, por su parte,  prefiere apostar por precios más ajustados y por modelo, de todas las gamas, desde medias hasta más altas, y cómo no, también tiene puestos los ojos en los mercados emergentes con dispositivos muy económicos y de precios muy ajustados.

Estas cifras, pertenecientes al periodo comprendido de enero a marzo de 2013, todavía no computan los resultados que se esperan obtener con el que promete ser la gran estrella de Samsung, Galaxy S IV, que saldrá a la venta en nuestro país mañana, 27 de abril. Samsung y Apple, ¿enemigos irreconciliables? Veremos los resultados de los próximos meses.