Los audios de WhatsApp llegaron para reducir el tiempo que pasamos escribiendo. Pero a mucha gente no les gusta. Descubre cinco errores muy comunes que cometemos con los audios de WhatsApp.

¿Eres de los que se pasa el día enviando mensajes de audio por WhatsApp o Telegram a todo el mundo? O al contrario, quizá recibes muchos, y no los soportas.

Los mensajes de audio son una buena solución cuando tienes prisa, no te apetece teclear, o tienes que decir algo en donde el tono de voz es importante.

El problema es que, para la mayoría de la gente son un fastidio, porque pierdes más tiempo escuchando que leyendo. Y a lo mejor te tiras 2 minutos con la oreja pegada al móvil, o al manos libres, y cuando termina te das cuenta de que no ha dicho absolutamente nada.

Errores con los audios de WhatsApp

Nuestra compañera Victoria Bustamante, de Business Insider, ha recopilado los fallos más comunes que los usuarios cometen con los mensajes de audio de WhatsApp. Son normas de buen uso de la app, así que merece la pena conocerlas.

El primero de todos está en la longitud. WhatsApp recomienda una duración máxima de 2 minutos, pero eso es una auténtica eternidad. Muchos destinatarios ni los escucharán, o lo harán a velocidad rápida.

La duración ideal está entre los 30 y 60 segundos. Los justo para no cansar pero lo suficientemente largo para justificar que no envíes un texto.

Si aún así tienes mucho que decir y no quieres hacer una llamada, la mejor solución es enviar varios mensajes cortos. Se pueden responder por separado, y escuchar por partes. Pero que no sean más de 2 o 3, porque sino asustarán al destinatario. Nadie quiere ponerse a escuchar 20 mensajes de 30 segundos de audio.

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Otro error que suele cometerse con los audios de WhatsApp es... contestar con mensajes de texto. Si te envían un audio, por cortesía, responde con otro audio. Es lo que suele esperar la otra persona. Además la conversación será más fluida.

Un fallo bastante común con los audios de WhatsApp es escucharlos con el volumen alto, o en un lugar público. Las paredes oyen y, al contrario con un texto, un audio lo pueden interceptar los demás.

Puedes estar revelando información privada, que es un delito. El audio puede cambiar de golpe y lo que parecía una conversación instranscendente, se convierte en un audio privado, o incluso comprometido. Escucha siempre los audios de WhatsApp con el volumen bajo, o mejor aún, con auriculares.

Y por último, un buen consejo es no abusar de los mensajes de audio. Alguno de vez en cuando está bien. Pero si mandas varios a la misma persona todos los días, acabará cansándose. Si tanto tienes que decir, una llamada es más rápido y menos cansino.

Los errores cometidos con los audios de WhatsApp o Telegram pueden acabar desquiciando al destinario, hasta el punto de que te ignore. Así que ten cuidado...