El avance de la IA ha sido notablemente más fallido que acertado según el CEO de una compañía de robótica

El cofundador y CEO de Serve Robotics parece tener bastante claro que pese a que, nosotros nos empeñemos en hablar de los progresos de la IA, la realidad es bastante diferente. Nos hemos dejado nublar por lo mediático y en realidad hay poco avance.

Este usa un aspecto vital en la inteligencia artificial para medir con exactitud su progreso: su capacidad para gestionar los acontecimientos imprevistos conocidos comúnmente como casos límite. 

Considera que actualmente una IA no consigue ser precisa y fiable a la vez. Si consigue al 100 % una, pecará en la otra y viceversa. Resolver esto sigue siendo el santo grial de la IA.

Por ejemplo, si Spotify reproduce las canciones que te gustan el 95% de las veces (precisión), pero sólo sale a la superficie la mitad de las canciones que te gustan, su fiabilidad sería del 65%. En el caso de los robo taxis, la cosa se complica ya que es necesaria una fiabilidad y precisión del al menos un 99 %. 

Y es que, se necesitan décadas para que estas tecnologías alcancen una madurez mínima para ser capaces de resolver casos límite.

Por otro lado, destaca el puesto que se han ganado los robots de reparto. En este caso tan concreto, se ha preferido ganar en tiempo y servirse de estos en un escalafón más bajo, ya que se complementan con el humano y así lograr el máximo rendimiento.

Este es el modelo de IA más usado, que conduce a la comercialización temprana, y las mejoras incrementales una vez lanzado ayudan a impulsar los KPI empresariales. 

Prefieren centrarse en casos sencillos, pero colaborar con estos avances que a nivel empresarial generan grandes beneficios y repercusión mediática. Todo se traduce en beneficios. "Al fin y al cabo, la ciencia ficción no tiene cabida en la planificación empresarial", concluye el CEO.