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Bose quiere llevar su tecnología de cancelación de ruido a los coches

Para mucha gente escuchar música mientras conducen es una condición indispensable, pero los ruidos de la calle y la carretera pueden fastidiar incluso la mejor canción. Este es el problema al que quiere poner solución Bose, una de las compañías más potentes en lo que a altavoces y auriculares con cancelación de ruido se refiere.

Uno de los directivos de la empresa, John Feng, gerente de Bose Automotive, Active Sound Management Solutions, ha explicado en la presentación de su nueva tecnología de cancelación de ruido para coches que "Durante años, nos han preguntado por qué no podemos simplemente adaptar nuestra tecnología de auriculares con cancelación de ruido al interior de los vehículos para una experiencia de conducción más tranquila", por lo que ahora han decidido poner definitivamente el proyecto en marcha.

Aunque esta idea supone un reto para los sistemas de reducción o cancelación de ruido, debido a las dimensiones del habitáculo de los coches en las que debe instalarse, la compañía asegura que, tras muchas pruebas, ha conseguido un nivel de reducción del ruido de la carretera suficiente para sentirse seguros de poder competir con el resto de proyectos similares que hay actualmente en el mercado.

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Ahora que Bose ya tiene la tecnología lista, ahora el siguiente paso consiste en conseguir socios dentro de las empresas automovilísticas para construir vehículos en los que el ruido exterior se mantenga en niveles mínimos dentro de los coches, gracias a un sistema de autoregulación que han denominado QuietComfort Road Noise Control (RNC)

El equipo necesario para conseguir aislar el interior de los coches estará compuesto por varios acelerómetros, un software de procesamiento de las señales patentado por Bose, diferentes micrófonos repartidos tanto dentro como fuera del vehículo, y el sistema de audio del propio vehículo que permitirá controlar el nivel de sonido del exterior deseado. 

Los acelerómetros se encontrarán en la carrocería del coche y se encargarán de medir las vibraciones generadas por el ruido exterior, para después pasarle la información al software. A su vez, los micrófonos colocados en el interior del vehículo calculan cuánto de este ruido está entrando en el vehículo.

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Toda esta información será procesada por el software para realizar la señal de cancelación de ruido y regular la intensidad según el tipo de carretera o las condiciones del vehículo, incluso según este vaya envejeciendo y los materiales aislantes empiecen a perder progresivamente sus propiedades.

Bose asegura que trabajará con los fabricantes de automóviles durante todo el proceso de desarrollo del vehículo para comprobar que el sistema QuierComfort RNC se adecúa correctamente a la estructura del coche y espera que esta tecnología empiece a llegar a los consumidores a finales de 2021

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