Chromecast vs una Raspberry Pi 3 conectada a la TV: pros y contras de cada opción
En este artículo nos vamos a centrar en las ventajas y desventajas que puede tener Chromecast y una Raspberry Pi conectada a la televisión, para que sepas qué dispositivo te viene mejor según tus intereses.
Hoy día gracias a una Raspberry Pi podemos imitar el funcionamiento de otros dispositivos como consolas, pequeños ordenadores, estaciones de trabajo y hasta un Chromecast.
Y es que es posible convertir una RasBerry Pi 3 en un Chromecast si la conectamos a la televisión con una configuración previa, y eso podría ser una ventaja para ti si cuentas con las herramientas y conocimientos adecuados.
Chromecast vs una Raspberry Pi 3 conectada a la TV: pros y contras de cada opción
A continuación vamos a hablarte de las ventajas y las desventajas de un Chromecast y una Raspberry Pi 3 conectada a la televisión, para que veas en qué características sale ganando cada una de ellas.
Instalación
El Chromecast es tan fácil como enchufarlo a la televisión, y emparejarlo con tu dispositivo móvil gracias a Google Home. Un proceso que puedes hacer en apenas un minuto.
El proceso para transformar una Raspberry Pi 3 en una especie de Chromecast es mucho más largo porque primero se nos exige instalarnos una ROM de Android dedicada con Etcher, buscar las apps de Google que no nos vendrían de serie con la ROM anterior, realizar unas configuraciones en nuestra Raspberry Pi 3, y configurar la interfaz de pantalla con un launcher especial. Por si te interesa, tienes el proceso completo aquí.
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Facilidad de uso
El Chromecast enchufado a la televisión es tan sencillo como utilizar Google Home en tu dispositivo móvil, o pulsar los distintos iconos de Chromecast que yacen en las aplicaciones que tengamos en el móvil.
Con la Raspberry Pi 3, ya una vez configurada, necesitamos adquirir un control adicional para realizar mejor las acciones, aunque por suerte es fácil de instalar.
Funciones habilitadas
Para utilizar Chromecast únicamente necesitas tener las aplicaciones en tu dispositivo móvil, y que sean compatibles con el mismo. Es tan fácil como ejecutarlas y tocar el icono de Chromecast determinado.
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Para la Raspberry Pi necesitamos bajarnos todas las aplicaciones y esperar a que sean totalmente compatibles, porque no lo serían todas. Aparte necesitaremos una tarjeta microSD de buena calidad para almacenar cada una de ellas y haber hecho bien la configuración previa.
Precio
El precio de un Chromecast y de una Raspberry Pi 3 base es casi el mismo. Pero si ponemos sobre la mesa todas las herramientas que necesitamos para convertir nuestra Raspberry Pi 3 en una especie de Chromecast, nos sale más barato la opción de Google.
De esta manera, si optamos por la Raspberry Pi 3 necesitamos adicionalmente una tarjeta microSD de buena calidad, una fuente de alimentación confiable, un teclado y un ratón USB independiente, memoria USB, cable HDMI, un cable Ethernet y un mando de control inalámbrico. Al final el precio podría hasta triplicarse si optamos por transformar la Raspberry Pi 3 en una especie de Chromecast.
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En resumidas cuentas
Está claro que siempre te va a resultar mucho más barato y sencillo de configurar un Chromecast y enchufarlo a la televisión, dado que emparejarlo a tu teléfono móvil es tan fácil como abrir Google Home.
En todo caso si ya tienes una Raspberry Pi 3, las herramientas necesarias y conoces los entresijos de este pequeño gran ordenador, puedes conseguir casi los mismos beneficios del Chromecast sin tener que adquirir el aparato de Google.
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Etiquetas: Chromecast, Raspberry Pi