No se puede negar que el Elon Musk, fundador de empresas innovadoras como Tesla o Space X, sabe encontrar fórmulas para divertirse al tiempo que hace caja para sus proyectos. La última ocurrencia del magnate sudafricano de la tecnología fue crear un lanzallamas y venderlos por 500 dólares. La acogida fue sencillamente espectacular y se vendieron más de 20.000 unidades.

El pasado día 9 de junio, The Boring Company organizó un evento multitudinario para entregar las primeras 1.000 unidades de este lanzallamas –curiosamente llamado No-lanzallamas por cuestiones legales— a sus compradores. Esta iniciativa de vender lanzallamas por Internet sirvió para que The Boring Company ingresara la nada despreciable cifra de 10 millones de dólares en solo cuatro días.

El evento tuvo lugar en un estacionamiento cercano a Space X, la compañía que hace algunos meses puso en órbita un Tesla Roadster, y fue publicado en las redes sociales por el propio Elon Musk añadiendo algunas fotos de cómo sus propietarios se divertían jugando con sus nuevos “juguetes”.

Si ya de por sí no fuera curioso el hecho de distribuir un lanzallamas por Internet, la compañía de Elon Musk obliga a los propietarios a aceptar una serie de condiciones de uso antes de entregarlo. Entre estas condiciones de uso destaca la que indica que el usuario no utilizará el lanzallamas dentro de casa, para quemar objetos intencionadamente o, literalmente, no apuntará a su esposa con él ya que la empresa no se hará responsable del uso indebido.

Como nota curiosa, destacar que ya han aparecido las primeras unidades de estos No-lanzallamas en eBay por un precio superior a 3.000 dólares. Por lo visto, Elon Musk no será el único en sacar un beneficio económico de este peligroso juguete.