Las principales compañías tecnológicas están desarrollando sus respectivas inteligencias artificiales, algo futurista hace unos años, pero que hoy trabaja codo con codo con los humanos. La frontera parecía ser la IA militar, pero ahora Google ha establecido un acuerdo con el Departamento de Defensa de Estados Unidos para desarrollar una inteligencia artificial militar para drones.

No, la inteligencia artificial militar que Google está desarrollando junto al Pentágono no servirá para guiar misiles o manejar robots, una idea que suena a ciencia ficción (por el momento), sino para analizar vídeos e imágenes que capturen los drones del ejército de los Estados Unidos. Nos gustaría saber qué opinan Zuckerberg y Elon Musk de esto...

El proyecto de esta IA llevaría en marcha unos meses, pero ha sido ahora cuando Google lo ha comunicado a los empleados. Esto, como podéis adivinar, ha traído consecuencias. Hay miles de empleados que ya conocían la implicación de Google en la creación de una IA militar, lo que les llevó a firmar peticiones para que los de Santa Monica se retiraran. Docenas de trabajadores, directamente, se desvincularon de la compañía.

Y esto, claro, lo sabían desde Google. La compañía era consciente del revuelo que la noticia causaría y, según un correo electrónico al que ha tenido acceso el New York Times, el científico jefe de Google Cloud, Fei-Fei Li pidió prudencia a sus compañeros a la hora de mencionar la implicación de la IA a la hora de anunciar el acuerdo con el Pentágono.

Li, textualmente, dijo que ''la IA armada es, probablemente, uno de los asuntos más polémicos de la inteligencia artificial, si no el que más. Esto es carnaza para los medios de comunicación, ya que querrán dañar a Google a toda costa''. Puede que el fundador de Google, Sergey Brin, ya supiera algo cuando avisó sobre cómo se podrían utilizar las inteligencias artificiales. 

De momento, Maven, que así se llama la inteligencia artificial de Google con fines militares, se encarga de dar apoyo a los analistas del ejército. La cantidad de imágenes y vídeos tomados por drones de vigilancia es tal que su análisis era casi imposible por parte de humanos, algo que una inteligencia artificial sí puede realizar.

Maven se apoya en el aprendizaje profundo para reconocer patrones y objetivos, y para ser más eficiente a la hora de localizar personas que se desplazan de un punto a otro. Y, de hecho, Maven ya a tenido alguna misión. En diciembre, diferentes medios avisaron que el Gobierno estaba utilizando una IA para combatir al ISIS.

10 usos de la inteligencia artificial que nadie se hubiera imaginado

Ahora bien, ¿cuál es la barrera? Según el contrato, esta inteligencia artificial solo podrá usarse para vigilar, siempre desde el punto de vista de ''acciones no ofensivas''. Esto quiere decir que, al menos es lo que pretende la compañía, no se use para crear armas con inteligencia artificial.

Se trata, sin duda, de una decisión polémica de una compañía que era consciente de la sensibilidad de la colaboración, ya que podía dañar su imagen de cara al público. Sin embargo, con la inteligencia artificial rindiendo en tantos frentes en nuestra vida cotidiana, era obvio que también lo hacía en el campo militar. Aunque fuera un ''secreto'' hasta ahora.