Como sacado de la serie de Black Mirror, Microsoft ha patentado una idea un tanto... perturbadora, y es que quiere crear un chatbot para que hablemos con nuestros muertos. Puede ser una idea que reconforte a millones de personas, pero que a la otra mitad del planeta no nos ayude en absoluto, ya que las muertes han de superarse y cerrar círculo.

Microsoft podría estar rozando una línea que le va a traer más de un quebradero de cabeza. Según la patente, la idea de Microsoft es crear un chatbot para "traer de vuelta" a nuestro ser querido fallecido y crear conversaciones.

Para reproducir conversaciones lo más fieles a la realidad posibles, lo que haría el software sería analizar la información sobre esa persona, ya fueran artículos que escribió, tweets, fotografías, chats, mensajes de voz, vídeos, etc.

De esta forma se crea una especie de clon virtual para que hable, se exprese, actué, decida, etc. como lo haría nuestro amigo o familiar fallecido. Es una idea muy de películas de ciencia ficción y si fuera el día de los santos inocentes, nos estaríamos riendo, pero no... Parece que Microsoft va en serio.

Lo más rocambolesco es que podríamos hacer copias de gente que sí está viva, incluso de nosotros mismos. Aquí si que encaja el famoso debate de: "¿Serías amigo de ti mismo?, ¿te enamorarías de ti mismo?".

La patente es real, de hecho es pública y está en la web oficial de United States Patent and Trademark Office. A lo largo del texto se detalla el chatbot, su uso, en qué consiste esa tecnología, y hay diversos gráficos para ejemplificar el texto.

Microsoft Surface Pro 7

Esta tablet PC de Microsoft viene con Windows 10 como sistema operativo y un Core i5 de última generación. Además cuenta también con almacenamiento SSD y una pantalla Full HD de 12,3 pulgadas.

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Creemos que ningún psicólogo lo suficientemente bueno aprobaría esta idea. No dejar ir y aceptar la muerte nos impide seguir con nuestras vida, y eso es algo muy grave.

Este supuesto chatbot de Microsoft crearía dependencia en miles de millones de personas que sufren tras la pérdida de un ser querido. Si es duro ver una foto, o volver al sitio donde un día fuimos felices, imaginemos lo duro que podría ser volver a oír su voz.