Por qué el Samsung Galaxy Note 9 tendrá un disipador monstruoso

Cada vez falta menos para que el Galaxy Note 9 salga a la palestra, pero poco a poco vamos conociendo detalles del nuevo terminal de gama alta de Samsung. O de gama premium, si nos dejamos llevar por el precio que se estima tendrá el nuevo miembro de la familia Note. 

El Samsung Galaxy Note 9 se presentará muy pronto, el próximo 9 de agosto, en un evento en Nueva York donde, además del propio terminal, esperamos ver novedades de Samsung, como el nuevo Galaxy Watch que podrían no querer desvelar en IFA (la gran feria tecnológica de Berlín), sino en la presentación del nuevo Note.

Uno de los atractivos de los teléfonos Note de Samsung es la inmensa pantalla y el rendimiento del terminal que permite que sea, junto al S-Pen, un dispositivo indicado para labores profesionales. Además, gracias a la potencia del procesador (que será un Snapdragon 845 o el Exynos 9810 de Samsung), también contamos con un gran rendimiento en el modo escritorio.

Sobre el modo escritorio del Samsung Galaxy Note 9, estos últimos días ha sonado el rumor que apunta a que no necesitaremos un dock especial para usar el Note 9 con un monitor externo, teclado y ratón, sino, simplemente, conectarlo mediante un puerto USB Tipo-C a HDMI directamente.

Además, otro rumor apunta a una posible exclusividad de Fortnite durante un mes en el Note 9, lo que indica que, además de para usarlo en modo escritorio, Samsung quiere que el Note 9 sea un dispositivo para jugar. Los móviles están cada vez más capacitados para ello y las grandes compañías están dando el salto a estas plataformas.

Por eso, y según los últimos rumores, el Samsung Galaxy Note 9 contará con un enorme heatpipe de cobre que transmitirá el calor del procesador a otras partes del terminal con el objetivo de evacuar dicho calor y no provocar pérdidas de rendimiento en el procesador debido a la elevada temperatura.

Esta solución ya la hemos visto en el Galaxy S9, pero parece que el disipador pasivo de cobre del Samsung Galaxy Note 9 será más parecido al del Razer Phone (un teléfono gaming que probamos a fondo y cuyo disipador, de hecho, funciona bastante bien) que a su hermano de la familia Galaxy.

Además de una mejora térmica a la hora de jugar, un gran disipador de cobre permitirá que, en modo escritorio, el calor no sea un enemigo del terminal. Ya falta menos para el 9 de agosto... y para que Samsung nos saque de dudas.