La tabla periódica es la espada de Damocles de todo estudiante. Aunque nos la aprendamos, el peligro sigue ahí, en cualquier momento puede caernos sobre la cabeza y nosotros no estar preparados ante semejante reto.

La ciencia es algo precioso, llena de retos, preguntas y respuestas. Demostrarlo es lo complicado si no avanzamos, y esto es difícil con el sistema educativo que tenemos, el cual tiene mucho que aprender de las nuevas tecnologías como la que te traemos hoy aquí.

Los niños son muy visuales, por eso si conseguimos mostrarles en qué se traducen sus esfuerzos en los ejercicios de química, física o matemáticas, lo más seguro es que se apasionen por estas materias tan puras.

En el campo de la educación, Google es una de esas compañías que lleva años esforzándose por traer avances y herramientas que ayuden a los niños a aprender divirtiéndose. Y el caso de la tabla periódica interactiva que hoy os traemos es muestra de ello.

Esta tabla está disponible a través de cualquier ordenador o dispositivo móvil con tan sólo pinchar en este enlace.

En ella lo que podemos hacer es repasar los 118 elementos químicos, e ir pinchando de uno en otro para conocer toda su información con tan solo echar un vistazo.

La tabla periódica de Google es realmente útil e interactiva, justo lo que más se necesita en los primeros pasos del estudio, ya que no solo nos muestra su símbolo, su masa atómica, su densidad o el año de descubrimiento junto a su descubridor.

Si no que va a un paso más allá, porque nos despliega una representación animada en 3D del modelo atómico de Bohr de cada uno de los elementos, pudiendo observar con todo detalle su construcción molecular.

Además, para cada elemento la tabla periódica nos hace un pequeño resumen o presentación. Por ejemplo, cuando pinchamos en el hidrógeno este nos dice que "el hidrógeno es el elemento más común en el universo, constituyendo alrededor del 75% de su masa".

Estas herramientas son muy útiles, y el camino a seguir a por parte de la educación si quieren enganchar a las nuevas generaciones. Hay tiempo, hay medios e incluso hay lenguas robóticas.