Twitch vive su primera huelga de creadores por culpa de las raids del odio

Cuando en tu servicio tienes a millones de personas al día consumiendo contenido y a otros cientos de miles de creadores emitiendo, es cuestión de tiempo que las cosas se vayan de las manos.

Twitch, la plataforma más utilizada del mundo para emitir y para ver contenido en streaming, es victima de esta realidad, ya que además de haber geniales creadores como pueden ser Ibai y compañía, hay otros que aprovechan su posición para hacer daño y lucrarse de ello.

Abusos en el chat, emitir en directo otros canales para reírse de ellos y, ahora, las raids del odio, donde streamers mandan a sus seguidores a un canal concreto para reírse de él.

Esto se produce a través de una herramienta de Twitch llamada raid, que consiste en mandar a todo tu público que está viéndote en directo a otro canal previamente elegido, normalmente utilizado por parte de los creadores grandes para dar visibilidad a canales más pequeños y apoyarlos.

El problema es que las raids del odio están ganando fuerza en los últimos meses y las victimas de éstas son colectivos marginalizados donde personas LGTBI o racializadas sufren el acoso de miles de hómofobos y racistas.

Y, pese a las quejas generalizadas, desde Twitch llevan un tiempo alegando que no pueden hacer nada contra esta práctica, lo que ha propiciado que los propios creadores de contenido sean los que se han tenido que levantar y quejar de forma pública.

Bajo el hagstag #ADayOffTwitch, miles de streamers han decidido hacer un apagón este 1 de septiembre en forma de huelga, exigiendo medidas concretas, como la de que los creadores puedan aceptar o denegar raids entrantes, que un correo electrónico sólo pueda tener una cuenta de Twitch y ser más transparentes en la protección de los creadores.

Si bien muchos de los grandes streamers no van a seguir la huelga (Ibai anunció anoche que él se unía a la huelga), un gran número de creadores influyentes, con miles de seguidores en cada directo, sí se han posicionado a favor.

Twtich, al respecto, ha dicho que entiende y defiende el derecho a huelga de sus creadores, pese a su inacción. Mientras tanto, la comunidad pide reflexión y tacto ante un problema grave que pese a que lo sufren unos pocos, éstos representan a millones.