Regístrate en Google Talk

Accede al archivo de descarga

Para poder utilizar Google Talk es necesario que tengas una cuenta de correo en Gmail. Si no es así, dirígete a la página de principal del buscador y pincha en la pestaña Gmail, en el menú superior. Una vez que tengas tu cuenta en Google, entra en esta dirección, www.google.es/talk/intl/es/ y haz click en el enlace siguiente:

Instala Google Talk en tu equipo

Haz doble click en el archivo que has descargado en el paso anterior para iniciar la instalación de Google Talk. Sigue las instrucciones del asistente y, cuando termine el proceso, lee las condiciones de licencia y, si estás conforme, pincha en Acepto.

Inicia sesión en el chat de Google

En menos de un minuto tendrás instalado Google Talk en tu ordenador. Aparecerá una ventana flotante en tu pantalla, desde la que podrás chatear con tus amigos. Para comenzar a usarlo, tendrás que escribir tu dirección de correo de Gmail y una contraseña. Puedes dejar que el navegador recuerde tu contraseña si se trata de un ordenador personal. 

Observa los avisos Google

Si mantienes iniciada tu sesión de Google en tu navegador, después de instalar Google Talk aparecerán, en la parte inferior de la pantalla, unas notificaciones que, entre otras cosas, te proporcionarán información sobre los correos entrantes.

Cambia de usuario

Si compartes ordenador o tienes varias cuentas en Google puedes cambiar el usuario en cualquier momento. Desde la ventana de chat, pincha en la pestaña situada justo debajo de tu nombre y selecciona la opción Salir. A continuación, podrás ya escribir el nombre y contraseña del nuevo usuario.

Configuración del chat de Google

En la ventana del chat de Google Talk, haz click en Configuración. Se abrirá una nueva ventana con diferentes opciones de ajuste. Las primeras pestañas de la ventana están referidas a la configuración del chat. Entre otras funciones, como la de iniciar automáticamente con Windows o bloquear a determinados contactos, puedes cambiar la fuente para escribir de forma más original. Eso sí, cuidado con la legibilidad.

Ajusta los avisos y notificaciones

Los avisos pueden ser útiles pero, en determinadas situaciones, te pueden molestar. Selecciona, en la ventana de configuración, la pestaña Notificaciones y selecciona aquellas que te parezcan imprescindibles. Si lo prefieres, puedes desactivar la opción Inhabilitar todas las notificaciones.