Cinco trucos para comprar un coche de segunda mano y que no te timen
Enrique León
El mercado de segunda mano cuenta con grandes oportunidades en lo que a coches se refiere. La oferta es enorme, con unidades de todo tipo y de diferentes características.
Para mucha gente, es una opción más viable que comprar uno nuevo, algo más costoso, aunque también tiene sus evidentes ventajas, como por ejemplo la opción de comprar un modelo híbrido o ECO.
El único problema es que todos ellos están usados, y para evitarte dolores de cabeza deberás de seguir unos pasos. Estos son nuestros 5 consejos para comprar un coche de segunda mano.
Hazte las preguntas oportunas
Para encontrar nuestro coche ideal debemos de hacernos las preguntas oportunas. Debemos estar seguros del tipo de coche que queremos antes de comenzar a buscar y, tras ello, analizar las condiciones de las unidades elegidas. Debemos de tener claro nuestro presupuesto, fijando un precio máximo al que podemos llegar. Igualmente será necesario estar seguros del tipo de coche que necesitamos a medio plazo. ¿La familia va a aumentar? ¿Viajaré más?
Dónde buscar
Una vez decidido el tipo de coche que queremos debemos de comenzar a buscarlo. Te aconsejamos que empieces por tu entorno, quizás te llevas la sorpresa de que un familiar o amigo vende un coche perfecto para ti. Si no es así aprovecha las ferias donde vendan vehículos de ocasión para ver varias unidades o visitar concesionarios y profesionales. De la misma manera, revisa las diferentes páginas web donde se anuncian vehículos de ocasión.
Profesional o particular
La eterna pregunta, ¿profesional o particular? Una cuestión con una respuesta nada clara. Debes saber que si compras un coche a un particular podrás hacer más preguntas sobre el vehículo y recabar más información además de negociar.. Por el contrario, la garantía será menor. Con un profesional podrás tener menos información del vehículo, pero a cambio más garantía y respaldo. Eso sí, siempre dando por hecho que tanto uno como otro son personas honestas y serias.
Haz las preguntas oportunas
Si tienes delante tu coche ideal haz las preguntas oportunas. Si bien, estas podrán cambiar si estás ante un profesional o un particular. No puedes olvidar preguntar: ¿Por qué vende el vehículo? ¿Sufrió algún accidente? ¿Tiene libro de revisiones? ¿Averías? ¿Tiene facturas de dichas averías? ¿Cuántos propietarios ha tenido? ¿"Duerme" en garaje o en la calle?
Revisa el coche de arriba a abajo
La revisión al vehículo debe ser exhaustiva, al menos, dentro de nuestras posibilidades. Para ello no podemos olvidar pedir la documentación, poniendo énfasis en revisar si existen cargas fiscales (reservas de dominios, financiera, etc.). Igualmente ojea la ficha técnica, comprueba si está el manual de usuario y ten a mano un contrato de compra venta.
Si has terminado con la documentación revisa el exterior. No tengas tan en cuenta los arañazos y si las diferencias de pintura entre zonas, el mal cierre de puertas o si los espacios entre piezas son mayores en un lado que otro. En el interior debes revisar el estado del pomo o el volante, comprobando también la holgura de los asientos o el cinturón de seguridad. Si algunos de estos elementos brilla demasiado o están en mal estado puede que los kilómetros declarados no sean los reales. En último lugar no te olvides de levantar la rueda de repuesto y revisar la carrocería en busca de reparaciones de golpes.
El último lugar nos pararemos a revisar la mecánica. Una vez revisados los diferentes accesorios del coche pasaremos a observar el desgaste de las ruedas, el de los frenos y si la dirección tiene fugas. Arranca y observa el humo que emite, un punto que también debes revisar una vez probado en carretera. En movimiento observa que el coche tiene un correcto alineado y que al frenar no tiende a irse hacia un lado. En parado coloca el freno de mano, mete una velocidad y suelta el embrague progresivamente. Si se cala es buena señal.
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