Hace unos años los dispositivos de moda eran las pulseras “inteligentes”. Todas las marcas tenían su modelo y, de hecho, compañías que no pertenecían al segmento de la tecnología como tal “renombraron” pulseras chinas muy baratas para lanzarlas como un dispositivo propio.

Todos tenían una pulsera de actividad en la muñeca y la reina indiscutible era Xiaomi con su Mi Band (aunque bueno, otras compañías también se fueron abriendo hueco poco a poco, como Huawei).

Sin embargo, el dispositivo de moda ahora (o esa es mi sensación) son los auriculares true wireless. Desde que se presentaran los primeros AirPods, las compañías se pusieron las pilas para contar con un modelo propio en esta categoría y, de hecho, un caso muy curioso fue el de Nothing.

Y es que, no sé, cuando nace una compañía que llega de la mano del cofundador de OnePlus, te esperas que su primer producto sea un teléfono móvil, pero no, fueron los Nothing Ear (1).

Me encantaron esos auriculares porque por los 99 euros que costaban (ahora han subido de precio considerablemente, pero todavía se pueden encontrar ofertas) me parecía que ofrecían una experiencia muy equilibrada y, además, ofrecían cancelación de ruido activa.

Puede que no te lo parezca, pero el desarrollo de la tecnología de cancelación de ruido activa costó años de investigación y millones invertidos para que tú, ahora, puedas tener esa tecnología en… yo qué sé, auriculares de 50 euros como los FreeBuds 4i.

Esta es ley de vida: primero se saca la tecnología en productos que, evidentemente, son muy caros… y poco a poco van llegando a todos los estratos. Y sí, la cancelación de los Redmi Buds 3 Pro no es la de los Sony WF1000XM4, pero ahí está por si la quieres usar.

Y te confieso que yo soy un amante de esta tecnología, ya que no puedo salir a la calle sin unos auriculares de este tipo (lo pasé mal analizando los Nothing Ear Stick, aunque la calidad de sonido me flipa), pero mira por dónde, hay gente que no.

En los últimos podcast (tenemos un podcast buenísimo) a los que ha asistido mi compañero Chema Carvajal, siempre hemos hablado de auriculares y de esa dualidad entre cancelación activa y no cancelación.

Y es que, despreciando los millones que ha costado la tecnología, ¡Chema usa los auriculares sin cancelación activa! Recientemente ha analizado los LG Tone Free Fit, unos auriculares con una peculiar tecnología que acaba con las bacterias gracias a la luz ultravioleta y que tienen cancelación activa.

Pues bien, Chema ha usado el sistema ANC para poder analizarlos, pero en el podcast comentaba que, en el día a día, los lleva sin la cancelación activa. Y, la verdad, tiene razón en una cosa: la calidad de sonido es peor cuando se activa este sistema de cancelación.

Aunque, evidentemente, la cancelación activa tiene una ventaja en ciertas situaciones, es cierto que, por el propio sistema y el tener que ir captando sonido para mitigar ciertas frecuencias para que tengamos esa cancelación activa, se “carga” parte de las frecuencias de la propia canción en algunas ocasiones.

Esto provoca que no tengamos un sonido de tanta calidad con la cancelación activa como sí lo tendríamos sin esta cancelación. Evidentemente, aquí entran en la ecuación varios factores, como la calidad de los algoritmos, el segmento de cada auricular o la propia tecnología utilizada, pero mayormente… es así.

Además, hay usuarios a los que la sensación de vacío que se produce con esta tecnología les incomoda. A mi no, incluso los AirPods Max, que son bestiales en este sentido, no me siento extraño, pero al final cada usuario es un mundo.

Y bueno, poco a poco he ido aprendiendo que, aunque yo no sea el usuario objetivo, los auriculares “abiertos” tienen su público y entiendo perfectamente por qué los defienden.

Y tú… ¿eres de cancelación activa o no quieres ver esta tecnología ni en pintura?