¿El tamaño importa? Hemos decidido comparar el móvil más grande del momento –Mate 20X– con el más pequeño

¿Te has preguntado alguna vez cómo sería la experiencia de usar uno de los móviles más grandes del momento? O tal vez te preguntas justo lo contrario, ¿qué se siente al usar uno de los smartphones más diminutos del mercado? Te contamos cómo es la experiencia de pasar del smartphone más grande del mercado al más pequeño.
En las últimas semanas he pasado de usar un Huawei Mate 20X 5G, uno de los móviles Android más grandes del momento, a usar el Palm Phone Unlocked, uno de los más compactos del mercado. Aquí te cuento cómo ha sido mi experiencia de uso de estos dos smartphones tan distintos.
Como redactor de tecnología, estoy acostumbrado a cambiar habitualmente de smartphone. Estos constantes cambios de dispositivo me han curtido con una curiosa habilidad para adaptarme rápidamente a dispositivos con formas y tamaños muy diferentes.

Apenas necesito unas horas de uso para empezar a sentirme cómodo con los nuevos terminales, pero con un cambio de tamaño tan radical y unas características tan diametralmente opuestas, debo reconocer que el cambio me ha costado algo más de lo habitual.
cómo es la experiencia de pasar del smartphone más grande del mercado al más pequeño
- Así es el smartphone más grande y el más pequeño que he analizado
- El tamaño de un smartphone define tu comportamiento al usarlo
- Portabilidad: una característica que no siempre se tiene en cuenta
- Consumir contenido en el móvil: del cielo al infierno
- El secreto está en el equilibrio
Así es el smartphone más grande y el más pequeño que he analizado
Antes de meternos en harina vamos a ver las características de los dos protagonistas de esta historia. Hablamos del Huawei Mate 20X 5G y del Palm Phone Unlocked.
En primer lugar, tenemos el Huawei Mate 20X 5G, el último modelo de la gama Mate 20 que el fabricante pone en el mercado antes del lanzamiento de la nueva generación de Mate 30.
Tal y como pudiste leer en el análisis del Huawei Mate 20X 5G, su principal novedad es la incorporación de conectividad 5G. Si vives en una ciudad en la que ya existen zonas con cobertura de redes 5G, podrás aprovechar la mayor velocidad de conexión para disfrutar de todo el contenido online y en streaming con la misma velocidad que si estuvieras conectado a la fibra óptica de tu casa.
El Huawei Mate 20X 5G comparte dimensiones y una pantalla de 7,2 pulgadas con el resto de la gama Mate 20, por lo que estamos hablando de un smartphone grande. Realmente grande.
Palm Phone Unlocked | Huawei Mate 20 X 5G | |
---|---|---|
Dimensiones | 96,6 x 50,6 x 7,4 mm | 174,6 x 85,4 x 8,4 mm |
Peso | 62,5 g | 233 gr |
Tamaño de pantalla | 3,3" | 7.2" |
Panel | LCD IPS | OLED |
Resolución | 1280 x 720 px | 2.244 x 1.080 px |
Puntos por pulgada | 445 ppp | 346 ppp |
Cámara trasera | 12 Mpx | 40 Mpx apertura f/ 1.8, 27 mm 8 Mpx apertura f/ 2.4, 80 mm (telefoto) OIS 20 Mpx apertura f/ 2.2, 16 mm (gran angular) |
Cámara frontal | 8 Mpx | 24 Mpx apertura f/ 2.0, 26 mm |
Procesador | Qualcomm Snapdragon 435 | HiSilicon Kirin 980 |
Memoria RAM | 3 GB | 8 GB |
Almacenamiento | 32 GB no ampliables | 256 GB |
Batería | 800 mAh sin carga rápida | 4.200 mAh carga rápida SuperCharge 40W |
Carga inalámbrica | No | Sí |
NFC | No | Sí |
Wi-Fi Bluetooth Radio FM | 802.11b/g/n/ac (2,4 Ghz y 5 GHz) 4.2 No | 802.11b/g/n/ac (2,4 Ghz y 5 GHz) 5.0 No |
Precio | 403 euros | 891,65 euros |
En lado opuesto encontramos al Palm Phone Unlocked, un smartphone que, tal y como te contábamos en su análisis, ha sido diseñado expresamente para que se te quiten las ganas de usar el móvil, y ciertamente lo hace muy bien.
El tamaño de su pantalla, de solo 3,3 pulgadas, es una de sus principales bazas para lograr desconectarte de tu vida digital y hacer que levantes la vista del smartphone. Sin embargo, sus reducidas dimensiones y su peso lo hacen increíblemente cómodo de llevar y resulta ser un smartphone muy completo en cuanto a funciones.
El tamaño de un smartphone define tu comportamiento al usarlo
Si algo he sacado en claro de este experimento con smartphones tan opuestos ha sido la certeza de que el tamaño de la pantalla del smartphone condiciona tu comportamiento al usarlo, llegando incluso a cambiar tus hábitos de uso del móvil.
El tamaño de la pantalla te obliga a adoptar una determinada posición al sostenerlo y al usarlo. Con un cambio de tamaño tan pronunciado esos cambios salen a la luz. Me explico.
La media de pantalla de los smartphones actuales permiten usarlo con una mano sin mayores problemas. Esto deja libre la mano que no estás usando.
¿Por qué no emplearla en algo divertido mientras esperas en la cola del súper como leer tu Timeline de Twitter, responder al correo que acabas de recibir o al mensaje de tu pareja para que no te olvides comprar leche?
En mi caso, esta suele ser una de esas circunstancias en las que, aunque tenga una mano ocupada con mi compra, uso la mano libre para revisar el móvil. Personalmente esto me fue imposible con el Huawei Mate 20X 5G dado su tamaño, por lo que a medida que iban pasando los días, cuando me veía en situaciones similares, acababa por no sacarlo del bolsillo.
A pesar de las ayudas del sistema operativo del Huawei para usarlo con una sola mano, no resulta cómodo usarlo y el riesgo de que los casi 900 euros que cuesta se fueran al suelo tampoco anima a hacerlo.

Curiosamente, justo lo contrario me sucede con el Palm Phone Unlocked, cuyo uso puede ser más espontáneo y se combina perfectamente con otras actividades.
En este caso sus dimensiones son perfectas para echar un vistazo rápido a las redes sociales, pero la limitación la marca el diminuto teclado del Palm Phone Unlocked, que anima a revisar, pero sin interactuar demasiado para no tener que escribir.

Definitivamente, el Huawei Mate 20 X 5G ha sido más absorbente en ese sentido y requiere dedicación total al tenerlo que sostener con ambas manos. En ocasiones, incluso me he sorprendido a mí mismo por tener que pararme en plena calle a escribir una respuesta corta a un mensaje por el simple hecho de tener que dedicarle ambas manos a una acción tan sencilla, mientras que con el Palm Phone Unlocked directamente usaba mensajes y notas de voz.
Portabilidad: una característica que no siempre se tiene en cuenta
El destino ha querido que pase los meses de más calor probando estos smartphones tan diferentes, que incluso en alguna ocasión han definido qué tipo de pantalón ponerme para poder llevar el móvil en el bolsillo.
En verano las prendas que vestimos se reducen a lo mínimo imprescindible, y no hay chaquetas o abrigos con grandes bolsillos tras los que refugiarse. Llevar un smartphone de 900 euros todo el día en la mano por no tener unos bolsillos lo suficientemente grandes para él no entraba en mis planes.

Es en esos casos cuando uno agradece tener a mano el Palm Phone, un smartphone que literalmente, puedes llevar en cualquier bolsillo por muy ajustado que sea el pantalón o por muchas bermudas que vistas.
El tamaño no es un aspecto que habitualmente se tenga en cuenta a la hora de comprar un smartphone, más que para considerar que ello conlleva una pantalla con más pulgadas. Yo al menos nunca lo hubiera tenido en cuenta.
Sin embargo, es al encontrarte en esta situación cuando caes en la cuenta de la importancia de un aspecto que muchas veces se da por sentado en un smartphone: la portabilidad.

Llevas el móvil encima todo el día y a todas horas, por lo que un móvil incómodo de llevar es una piedra en el zapato que te estará molestando constantemente y reclamará tu atención a cada movimiento: cada vez que te sientas, cuando te levantas, al entrar o salir del coche, al subir escaleras, etc.
Consumir contenido en el móvil: del cielo al infierno
En un tiempo en el que el todo el contenido multimedia y de ocio que puedes encontrar en la red está principalmente orientado al móvil, tener una pantalla de grandes dimensiones que ofrezca una buena calidad de imagen es todo un regalo del cielo.
Los móviles de grandes dimensiones tienen su público fiel y no lo es por casualidad. Una pantalla de grandes dimensiones garantiza una experiencia visual que difícilmente podrá igualar un smartphone compacto.

Contar con una pantalla de 7,2 pulgadas en la que ver series de Netflix, jugar a los últimos juegos, navegar por internet sin estrecheces o escribir mensajes y correos desde un teclado cómodo es un lujo asiático (nunca mejor dicho) que solo los usuarios más sacrificados saben apreciar.
En este sentido, la experiencia de uso y visual que ofrece el Huawei Mate 20X 5G es de una superioridad aplastante.
A pesar de la buena densidad de píxeles que ofrece la pantalla del Palm Phone Unlocked, su reducido tamaño no ha sido diseñado para disfrutar de contenido multimedia, al menos nada más allá de la reproducción puntual de un vídeo que te llegue por mensajería.

En ningún caso la experiencia en visionado de contenido en el Palm Phone Unlocked es equiparable a la del Huawei Mate 20X 5G, que además cuenta con el añadido de la conectividad 5G, que proporciona la velocidad apropiada para disfrutar de todo tipo de contenido de ocio sin las limitaciones que en ocasiones plantean las redes 4G.
El secreto está en el equilibrio
Tener la oportunidad de utilizar durante algún tiempo smartphones tan diferentes me han permitido tomar conciencia de la importancia de conservar un equilibrio razonable entre la portabilidad que requiere un dispositivo que va a acompañarte durante todo el día, y la comodidad a la hora de consumir contenido.
De hecho, la búsqueda de ese equilibrio ha sido uno de los motivos por los que toda la industria de la telefonía se ha apresurado a adoptar las relaciones de aspecto ultrapanorámicas de 18:9 a 21:9.

Con este cambio de formato se han obtenido smartphones con pantallas más grandes, en dispositivos que mantienen un tamaño compacto. Está claro que moverse en los extremos en los que me he movido durante las últimas semanas no es lo habitual.
Tanto el Huawei Mate 20 X 5G como el Palm Phone son dispositivos orientados a un público muy concreto y con unas necesidades muy bien delimitadas que no responden a los mismos criterios de la mayoría.
Los usuarios a los que van dirigidos ambos dispositivos son conscientes que deben renunciar a una serie de características en pos de obtener una mejor respuesta en otras. Durante estas semanas de uso he podido disfrutar de estas características, pero también padecer sus carencias.

De hecho, el Palm Phone Unlocked ha sido diseñado precisamente para desincentivar su uso y obligarte a levantar la vista del smartphone para recuperar tu vida “real” y volver a hacer esa cosa tan loca que es hablar con las personas que te rodean.
En contrapartida, su reducido tamaño invita a llevarlo siempre en el bolsillo por su comodidad, estableciendo una relación de amor odio con el smartphone. Un concepto de lo más revolucionario para tratarse de un smartphone.
Afortunadamente para mí, ambos dispositivos han coincidido en el tiempo sobre mi mesa de trabajo, lo cual me ha permitido combinar su uso y, como el que cambia de calzado cuando la ocasión lo requiere, he podido elegir el tamaño de smartphone que me apetecía llevar encima según la ocasión.
¿Tengo por delante un trayecto largo en transporte público? Le instalo mi tarjeta SIM al Huawei Mate 20X 5G y se convierte en el compañero perfecto para amenizar el desplazamiento.

¿Que el verano y la familia exigen máxima dedicación y un relajante paseo por la playa al atardecer? Pues es la ocasión perfecta para optar por el minimalismo del Palm Phone Unlocked con el que se incentiva el hábito de desconectar de la vida digital y se viaja más ligero.
En términos de uso diario en general, lo que esta experiencia de uso del smartphone más grande del mercado y el más compacto me ha enseñado es que lo más práctico es mantenerse en unas dimensiones intermedias y evitar los extremos, aunque para gustos los colores.
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Productos: Palm Phone Unlocked , Huawei Mate 20 X 5G