Poder automatizar las luces LED de nuestro hogar puede ser sumamente interesante no solo para ahorrar consumo energético cada mes, sino que también puede resultar útil a la hora de la seguridad de la casa.

Por todo esto la automatización y el monitoreo de los diferentes elementos de iluminación de la vivienda es algo que cada vez se ve con más asiduidad.

Estos sistemas de control de la iluminación LED pueden estar incluidos dentro de un sistema de domótica que controle toda la casa o pueden ser independientes. 

También podremos tener a nuestra disposición la gestión de la iluminación natural por medio de las persianas de la casa, algo que también puede ser una buena solución.

Pero cómo lo que nos ocupa hoy es la iluminación LED, tendremos que ver cuáles son las facultades que ofrece el control de este tipo de luz.

¿Qué es la iluminación automatizada?

El control de la iluminación por medio de domótica o por la conexión a Internet, lo que nos permite es distribuir la cantidad adecuada de luz a un espacio en un momento determinado de controlarla sin necesidad de estar presente en el domicilio.

El funcionamiento de estos sistemas de control de iluminación puede estar basados en la conexión a Internet directa de los componentes de esta o supervisados por un sistema de domótica central.

Los sistemas de domótica antiguamente servían para poco, sin embargo, desde el desarrollo de las luces inteligentes y el IoT (Internet of Things), su potencial ha crecido exponencialmente y se presentan como las soluciones de futuro para los hogares.

Todo lo que es la iluminación LED de las bombillas inteligentes han hecho que se consigue dar un gran paso adelante. 

Pero no debemos olvidar que estas bombillas también pueden funcionar de manera independiente, ya que se pueden conectar al WiFi de nuestra casa y podemos controlarlas desde nuestro smartphone.

Esto significa que la domótica no va a ser imprescindible.

Sistemas de iluminación automática

Como seguramente ya habrás deducido, las dos formas que tenemos de controlar la iluminación LED de nuestro hogar es por medio de sistemas domóticos o por la conexión directa de las propias bombillas a la red.

En lo que es el sistema de domótica tendremos dos tipos diferenciados para controlar la iluminación:

• Manual: el control manual es aquel que es independiente en cada grupo o zona de la casa. Es decir, cada una de las estancias de nuestro hogar va a tener su propio sistema de regulación o de automatización.
• Digital: en este caso se va a manejar todo lo que es la iluminación LED desde una sola interfaz, lo que significa qué podremos seguir tratando cada habitación de forma independiente, pero habrá que regularlo todo desde un mismo aparato domótico central.

Lo que es el control de la iluminación sin tener ningún tipo sistema domótica, se consigue, ya que las bombillas que instalemos en nuestra casa serán de las llamadas inteligentes, puesto que se pueden conectar vía WiFi a nuestro Internet, lo que provocará que las podamos manejar desde una aplicación de nuestro smartphone.

Hay que considerar que no todas las luces inteligentes tienen las mismas facultades. Es decir, puede ser que algunas se puedan regular en intensidad, pero otras no, al igual que las hay con distintos tipos de colores o aquellas que solamente vienen con la luz blanca o amarilla.

Control de la bombilla LED

Si optamos por bombillas que vamos a controlar nosotros desde nuestro teléfono móvil, debemos tener claro que para que esto ocurra la conexión a internet por medio del WiFi debe funcionar en todo momento, ya que si no es así el control desaparecería.

Existen bombillas que se pueden conectar al teléfono móvil por medio de Bluetooth, pero su funcionalidad es bastante escasa, puesto que no podremos controlarla si salimos, por ejemplo, de la habitación donde estén colocadas.

Es conveniente intentar que todas las luces inteligentes de la casa sean de la misma marca, ya que así podremos controlarla sin tener que variar de una aplicación a otra.

Gracias a estas aplicaciones vamos a poder subir o bajar la iluminación de una estancia (siempre que la bombilla sea compatible) o programarlas para que, a cierta hora, por ejemplo, bajen su intensidad o directamente se apaguen.

La parte positiva de todo esto es que podremos hacer que las luces se enciendan incluso si no estamos en casa, algo que puede ser una medida de seguridad para dar la sensación de que hay alguien en el hogar.

Todos estos sistemas de automatización también nos van a servir para ahorrar consumo de luz mensual (entre un 20 y un 30% menos), ya que podremos gestionarlo de muchas maneras. 

Por ejemplo, podremos asignar un sistema de programación para que todas las luces se apaguen a una hora determinada, para que llegado un momento del día todas las luces que estén encendidas bajen su intensidad o asignarles ciertos accesorios de los que os vamos a hablar a continuación.

Accesorios

Tanto los sistemas de domótica como los de conexión directa a las bombillas, nos pueden aceptar una serie de accesorios que van a ayudarnos en el manejo de lo que es toda la iluminación, además de servir para ahorrar energía eléctrica.

Sí que es cierto que hay algunos sistemas de domótica que ya vienen con estos accesorios dentro del propio programa y, por lo tanto, no necesitarían de ellos, por lo que estarían capacitados para hacer lo mismo, pero desde la Unidad Central.

Estos sensores pueden ser de varios tipos:

• Interruptor básico: es el que todos tenemos en nuestras casas para apagar o encender la luz. Aquí no hay mucho secreto que contar.
• Interruptor de atenuación: estos dispositivos son capaces de ajustar la salida de luz de una fuente. son una buena opción, ya que podremos conseguir, siempre que la bombilla LED sea compatible, atenuar la iluminación y, por lo tanto, también consumir menos.
• Temporizadores: aunque la inmensa mayoría de las aplicaciones para móvil que controla las luces LED por los sistemas domóticos ya traen un temporizador, en el caso en el que no lo tuviéramos, podríamos instalar uno para qué se gestione lo son los distintos tipos de rutinas que queramos ponerle a las luces.
• Sensores de presencia: este tipo de accesorios son sumamente interesantes, ya que permiten saber si hay alguien en la estancia donde la luz está encendida. Se podría programar para que la luz se apague a los 10 minutos de no detectar a nadie, por poneros un ejemplo.
• Sensores fotoeléctricos: también podríamos instalar este tipo de sensores que lo que hacen es qué detectan la luz natural en un espacio y a partir de ahí realizan la función que tengan marcada, que normalmente es la de apagar la bombilla. Esto podría estar bien para una estancia donde haya un niño que necesite dormir con cierta luz, para que cuando haya iluminación externa, dicha bombilla se pueda apagar.
• Astrológico: este tipo de sensores están preparados para programar la luz en función de la época del año en la que estemos. Se suelen utilizar principalmente para las luces exteriores.

Ahora que tienes todos los datos, te será mucho más sencillo saber qué sistema prefieres para la automatización de tu hogar por medio de la iluminación LED.

Lo que está claro es que es sumamente aconsejable comprar bombillas LED inteligentes para poder funcionar con un sistema de domótica, e imprescindible si lo queremos hacer de manera manual, es decir, simplemente con nuestra conexión WiFi y nuestro smartphone.