Fujifilm X-T20, probamos esta cámara sin espejo

Si has llegado hasta esta prueba de la Fujifilm X-T20, seguramente sea porque ahora mismo estás perdido en un mar de dudas ante la cuestión de qué cámara EVIL (sin espejo) elegir. Esperamos sacarte de dudas con este análisis de la cámara de Fujifilm, la cual de primeras se posiciona como una alternativa muy interesante para todo aquel que no quiera gastarse más de 1.000 euros en la compra de una cámara.

Empecemos por hacer las presentaciones. La Fujifilm X-T20 viene a ser la hermana pequeña (en características) de la Fujifilm X-T2, la cámara de objetivos intercambiables que desde hace un tiempo ya se ha convertido en una recomendación segura para todo aquel que busca una mirrorless dentro de un rango de precio razonable. Pero, ¿en qué sentido la X-T20 es "la hermana pequeña" de la X-T2? Además de la diferencia de precio (1.500 euros la X-T2 (solo cuerpo) vs 870 euros la X-T20 (solo cuerpo)), hay unas cuantas cosas más que distinguen la una de la otra.

Tal y como salta a la vista en una comparativa rápida, no por ser más barata la Fujifilm X-T20 es necesariamente peor que su hermana mayor. Hay muchas más diferencias entre la una y la otra (iremos mencionando todas ellas a lo largo de la prueba), pero las más importantes se resumen en tres puntos:

• El obturador mecánico de la X-T2 es capaz de disparar fotografías de hasta 1/8.000s, frente al límite de 1/4.000s de la X-T20 (si hablamos del obturador electrónico, el límite en ambas cámaras es de 1/32.000s). ¿Eso en qué se traduce? En que si buscas una cámara orientada específicamente hacia -por ejemplo- eventos deportivos, entonces la X-T2 es probable que se adapte mucho mejor a lo que necesitas; en cualquier otro caso, no descartes la X-T20.
• La X-T20 no tiene un diseño resistente a las salpicaduras del agua, de manera que deberás tener mucho más cuidado con ella del que necesitarías tener con la X-T2, la cual sí tiene un diseño sellado frente a las salpicaduras del agua y el polvo.
• Y, curiosamente, la X-T20 es la única de las dos que sí tiene una pantalla táctil.

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Poco a poco ya te puedes ir haciendo una idea de las diferencias que hay entre estas dos cámaras sin espejo de Fujifilm. Pero no creas que con eso ya tendrás resuelta la decisión de compra, porque una vez eligas una de estas dos cámaras -supongamos que te decides por la Fujifilm X-T20- tendrás ante ti el nada reto de compararla frente a las alternativas de la competencia. Y si hablamos de alternativas, hay al menos otros tres nombres que deberás tener en cuenta: Sony A6300, Canon EOS M5 y Nikon 1 J5.

De nuevo, insistimos en decir que la comparativa de las diferentes cámaras EVIL sin espejo que estás viendo en la tabla que hay encima de este párrafo es una reducción a unos pocas características de todas las diferencias que hay realmente entre ellas. Es para que te puedas hacer una idea de las especificaciones que ofrece cada fabricante en esta gama y, especialmente, del precio que cada cámara tiene en el mercado.

Tal y como puedes ver, la Fujifilm se mueve en un rango de precio no muy alejado de sus principales alternativas. No es ni la más cara ni la más barata de las cuatro que hemos mencionado en la tabla, y si comparas con otras alternativas verás que una buena sin espejo suele rondar casi siempre los 700, 800 o 900 euros (solo cuerpo).

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Pero ya está bien de introducciones. Hemos venido a hablar de la Fujifilm X-T20, así que una vez hechas todas las presentaciones es el momento de que entremos de lleno en el análisis en el que esperamos que consigas resolver algunas de las dudas que puedas tener acerca de esta cámara.

Durante esta prueba, estuvimos utilizando una unidad de la Fujifilm X-T20 acompañada de tres objetivos de Fujifilm:

• XC16-50 mm, f/3.5 - 5.6. Lo tenéis por unos 390 euros.
• XC50-230 mm, f/4.5 - 6.7. Lo tenéis por unos 430 euros.
• Y un objetivo fijo, el XF23 mm, f/2. Lo tenéis por unos 400 euros.

Diseño: ligera y muy fácil de manejar

¿Cuál es la principal ventaja de las cámaras sin espejo respecto a otras categorías? Entre otras cosas, que en principio son más ligeras y fáciles de transportar. La Fujifilm X-T20 cumple con esa premisa ofreciendo un diseño en el que desde el primer momento sorprende lo ligero que es el cuerpo de la cámara: estamos hablando de 383 gramos (incluyendo batería) que os podemos confirmar que en las manos se sienten realmente livianos.

De hecho, toda la cámara en sí puede presumir de un diseño muy contenido (118,4 x 82,8 x 41,4 milímetros) en el que ninguna persona debería tener problemas para desenvolverse con rapidez a la hora de disparar fotografías. Y tras unas pocas horas de uso, te acabas haciendo a la posición de todos los controles que, además, en la gran mayoría de las situaciones quedan al alcance de los dedos sin necesidad de mover la mano.

El diseño de esta cámara, y sus evidentes diferencias de dimensiones respecto a la hermana mayor X-T2, ya nos adelantan que este modelo no está tan orientado hacia fotógrafos profesionales (o al menos no como cámara principal) sino hacia los usuarios que buscan una cámara manejable y ligera. La correa, por cierto, se coloca sobre unas sujeciones metálicas.

Tal y como estáis viendo en las fotografías, nosotros hemos probado la versión más "estándar" de esta cámara (con la carcasa en color negro). Pero no hay que olvidar que la X-T20 también hereda parte de ese diseño vintage que tanto gusta en Fujifilm, y la otra versión en color plata que se puede encontrar en las tiendas es un claro canto hacia el diseño más clásico que ha habido en el mundo de las cámaras.

En la parte de la calidad de los acabados, tenemos que decir que esa sensación de ligereza que veníamos diciendo que transmite la cámara no está en absoluto acompañada de un acabado que se pueda tildar de pobre o de baja calidad. Está claro que el cuerpo tiene muchas partes de plástico, pero aún así todo el conjunto se siente robusto en las manos. Es una pena que no tenga el sellado frente a las salpicaduras del agua que sí trae su hermana mayor.

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Lo que sí tiene la X-T20 es una pantalla táctil que, además, se puede utilizar en diferentes posiciones. Es una pantalla LCD TFT de 3" que en la gran mayoría de las situaciones alcanza un brillo suficiente para utilizarla en exteriores, y no hay que olvidar que siempre que el sol nos lo ponga difícil para visualizar la imagen tenemos a nuestra disposición el visor OLED de 0,39 pulgadas con 2.360 mil puntos.

La pantalla, además de ser táctil, como decíamos también es abatible. Puedes utilizarla en diferentes posiciones gracias al mecanismo que esconde tras el panel, y se puede inclinar para visualizar su contenido tanto desde arriba como desde abajo. Lo que no se puede hacer es inclinarla hacia los lados, característica que -volviendo de nuevo a las odiosas comparaciones- sí tiene la pantalla de su hermana mayor, la X-T2.

Pero, ¿y qué hay de la distribución de los botones? Si miramos la cámara desde arriba, lo que veremos en el lado de la izquierda es la ruleta que nos permite elegir entre los diferentes modos de imagen. Dado que es una cámara de Fujifilm, recuerda que el modo de disparo "convencional" (el denominado Single frame) es el que se selecciona con el modo "S" (es el que puedes ver que está seleccionado en la fotografía). A la izquierda de la ruleta puedes ver también el botón del Flash.

Si nos vamos al lado derecho de la parte superior de la cámara, lo que tenemos son varios selectores diferentes: podemos configurar el obturador, la exposición y el modo de disparo (Manual o Automático), así como también hay un botón Fn (bastante difícil de acceder, por cierto). Y no busques la ruleta del ISO, porque solamente está presente en la X-T2... aunque cabe decir que en la X-T20 esto último se puede solucionar con este truco (es lo bueno de las teclas personalizables).

Para no dedicar mucho más tiempo a hablar del diseño, tenéis adjunta encima de este párrafo una galería en la que podéis ver parte por parte todos los ángulos de la Fujifilm X-T20. Eso incluye también otros aspectos de los que no hemos hablado en el texto: los puertos físicos, la ubicación de la ranura de la batería, los botones que hay alrededor de la pantalla... Mientras tanto, pasemos a hablar del siguiente apartado: el de la interfaz.

Interfaz: muchas opciones de personalización para dejar los botones a tu gusto

Buena parte de los botones que has visto en nuestro repaso al diseño de la Fujifilm X-T20 resulta que son personalizables por el usuario. Eso significa que puedes elegir qué función quieres asignar a cada uno de ellos, y en nuestro caso -por poner un ejemplo- teníamos el botón de Fn asociado al valor de la ISO. Pero había muchos otros ajustes más, tal y como puedes ver en la galería que te adjuntamos encima de este párrafo.

Desde los ajustes de la interfaz puedes elegir la función de prácticamente todos y cada uno de los botones de la cámara. Incluso las ruletas pequeñas, esas que están delante y detrás, se pueden asociar a una configuración específica (lo más útil es asociar una de las ruletas a la ISO, ya que así puedes modificar el valor directamente girando el botón hacia uno u otro lado).

Y sí, esta cámara también tiene WiFi, lo que significa que puedes transferir las fotografías de forma inalámbrica a cualquier otro dispositivo. Puedes incluso controlar la cámara de forma remota a través de la aplicación de Fujifilm (disponible tanto para Android como para iOS).

Experiencia de uso

El sensor APS-C CMOS de 24 megapíxeles con tecnología X-Trans que incorpora la cámara de la Fujifilm X-T20 no decepciona. En nuestra prueba estuvimos disparando las fotografías principalmente con los objetivos XC16-50 mm y XC50-230 mm, que son al fin y al cabo los que se ofrecen en la gran mayoría de los "packs" en los que se vende esta cámara, y los resultados eran sencillamente espectaculares.

Tanto el rango dinámico como los niveles de ruido (recuerda que llega hasta un nivel de ISO de 12.800) que consigue el sensor APS-C seguramente tengan pocos rivales a la altura de su nivel dentro de esta categoría de cámaras, e incluso las fotografías brutas que salen en JPG tienen un nivel de calidad más que decente para aplicar después algún post-procesado rápido en el ordenador. A la hora de disparar en RAW, la cámara te permite elegir si deseas aplicar o no algún tipo de compresión a las fotografías.

Para que podáis valorar por vosotros mismos los resultados de las fotografías, a continuación te dejamos algunas muestras más tomadas con la X-T20. Puedes ver las fotografías en su tamaño original pulsando sobre los enlaces que encontrarás debajo de cada imagen.

Longitud focal 50, f/5, 1/420 | Imagen completa

Longitud focal 230, f/6,7, 1/120 | Imagen completa

Longitud focal 230, f/6,7, 1/240 | Imagen completa

Longitud focal 16, f/8, 1/1.000 | Imagen completa

Longitud focal 50, f/7,1, 1/1.600 | Imagen completa

Longitud focal 17,5, f/8, 1/800 | Imagen completa

Longitud focal 50, f/6,4, 1/100 | Imagen completa

La Fujifilm X-T20, recordemos, también tiene la capacidad de grabar vídeos a resolución 4K (3.840 x 2.160 píxeles) a hasta 100 Mbps y hasta 30 fps, así como también graba en Full HD a hasta 60 fps (y 36 Mbps). Te dejamos a continuación con dos muestras de vídeos 4K grabados con esta cámara.

En términos de autonomía, podemos confirmar que la batería no tiene problemas en aguantar del tirón una sesión de 200 o 250 fotografías. Después, la carga se puede realizar tanto a través del adaptador de corriente que viene en la caja de la cámara (es el típico adaptador en el que hay que encajar la batería) como conectando la cámara directamente a la corriente a través de su puerto microUSB.

Opinión: es una sin espejo que se puede recomendar con los ojos cerrados

En esto de las cámaras sin espejo hay un catálogo de alternativas prácticamente infinito. Y cuando ya crees haber dado con la cámara que mejor encaja con tus necesidades, entonces te das cuenta de que estirando un poco tu presupuesto podrías acceder a una cámara de una categoría superior que con total seguridad te ofrecerá mejores prestaciones para lo que necesitas.

Dicho esto, tras nuestra prueba hemos de decir que, a modo de opinión muy resumida, todo aquel que se compre esta Fujifilm X-T20 quedará muy satisfecho con su compra. Es evidente que queda por detrás de su hermana mayor (la X-T2), pero si estás dispuesto a renunciar a esos detalles más profesionales de la T2 (más controles manuales al alcance de la mano, por ejemplo) entonces no vas a echar de menos ninguna característica.

La X-T20 es una cámara que tiene un precio elevado (ten en cuenta que si quieres comprar el cuerpo con objetivos deberás desembolsar más de 1.000 euros), pero ofrece unas prestaciones que difícilmente se pueden ver superadas por otra sin-espejo del mismo rango de precio. Tanto los fotógrafos más avanzados como los usuarios expertos aficionados a la fotografía encontrarán en ella unas características que se deberían adaptar exactamente a lo que buscan.

Especialmente los usuarios no-profesionales, aquellos que buscan una buena cámara para muchos años, encontrarán en esta Fujifilm X-T20 la puerta de entrada hacia su salto definitivo a la fotografía profesional. Si te decides a hacerte con ella siendo consciente de sus características, pasará mucho tiempo hasta que notes que la cámara se te queda corta para lo que necesitas.

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La cuestión no está tanto en si esta cámara es o no recomendable, cosa a la que en mayor o menor medida ya habrás encontrado respuesta leyendo nuestra prueba, sino en una pregunta que va más allá de eso y que debes hacerte antes de decidirte por ningún modelo: ¿es una mirrorless lo que necesitas para tus fotografías? Si la respuesta es un "sí", entonces ya conoces nuestra opinión sobre esta cámara de Fujifilm.