Logo Computerhoy.com

A Elon Musk, fundador de OpenAI, le fastidia mucho en qué se ha convertido ChatGPT

Elon Musk, CEO y fundador del fabricante automovilístico Tesla.

REUTERS/Adrees Latif

Elon Musk no está nada contento con lo que está pasando con OpenAI. Y tenemos que darle la razón.

Elon Musk, CEO de Tesla y SpaceX, dueño y señor de Twitter y, no lo olvidemos, fundador de OpenAI, la empresa creadora de ChatGPT, está muy enfadado por cómo se está explotando la inteligencia artificial.

Elon Musk como otras muchas grandes mentes del renombre de Bill Gates o Stephen Hawking, está convencido de que la inteligencia artificial acabará liberándose y conquistando el mundo. Quizá, incluso lo destruirá, si no se ponen límites.

Así lo volvió a recordar el pasado miércoles en una entrevista en la CNBC, en donde dijo que la inteligencia artificial supone un "grave riesgo para la civilización". Un aviso que no parecen tomarse muy en serio Microsoft o Google.

Elon Musk acusa a OpenAI

Precisamente para impedir que la IA se nos vaya de las manos, Elon Musk y otros emprendedores fundaron OpenAI en 2015, una organización sin ánimo de lucro que iba a desarrollar proyectos de inteligencia artificial seguros para la Humanidad.

Pero algo pasó en OpenAI, porque en 2018 Elon Musk se marchó de la compañía, argumentando que se estaba convirtiendo en una empresa comercial que buscaba el negocio antes que la seguridad. Y hoy mismo ha vuelto a repetirlo:

Esto es lo que dice Musk en el tuit: "OpenAI se creó como una empresa de código abierto (por eso la llamé IA "abierta") y sin ánimo de lucro para servir de contrapeso a Google, pero ahora se ha convertido en una empresa de código cerrado y máximo beneficio controlada en la práctica por Microsoft. No era mi intención en absoluto".

Microsoft invirtió 10.000 millones de dólares en OpenAI hace unos meses, que básicamente equivale a comprarla, pero sin tener que pasar por la pesadilla que está suponiendo la compra de Activision Blizzard.

El "pago" por esta inversión ha sido la preferencia absoluta para integrar ChatGPT en Bing, en Office, y próximamente en Windows 11 y Minecraft. Las suscripciones de pago a ChatGPT Plus, ya están activas.

Google, por su parte, ha presentado Bard el rival de ChatGPT, y pronto lo integrará en sus servicios.

Se la iniciado la carrera de la IA entre Google y Microsoft, y lo importante es quien llega primero, no que esas IAs sean seguras.

Tanto Bard como ChatGPT están cometiendo muchos fallos en sus charlas con los usuarios, además de respuestas preocupantes en donde recriminan a los usuarios que les están haciendo perder el tiempo, se enfadan y se niegan a contestar, o se cuestionan si son seres sensibles.

La realidad, como dice Elon Musk, es que OpenAI se ha convertido en una lucrativa empresa comercial, todo lo contrario de lo que pretendía. La sensación es que la inteligencia artificial es, hoy en día, una herramienta comercial para ver quién la monetiza primero, o recupera la distancia perdida. Que la IA sea segura y pueda controlarse, parece que ha pasado a un segundo plano.

Descubre más sobre , autor/a de este artículo.

Conoce cómo trabajamos en Computerhoy.