He probado alternativas a ChatGPT y este es mi indiscutible chatbot de IA ganador

Aunque ChatGPT es el chatbot basado en inteligencia artificial más popular en la actualidad, en los últimos meses se ha presenciado un boom de alternativas o competidores que quieren hacerle frente con más ventajas, diferentes formas de uso o el empleo de otros modelos de lenguaje.

Una de las áreas en las que están destacando estas alternativas es en la especialización. Mientras que ChatGPT es un modelo de lenguaje general que abarca una amplia gama de temas, otros chatbots están emergiendo con conocimientos y habilidades específicas. 

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Por ejemplo, existen asistentes de lenguaje enfocados al ámbito médico, financiero, de atención al cliente y muchos otros, lo que permite dar respuestas más precisas y detalladas en sus respectivas áreas de conocimiento.

Pese a esto en el artículo de hoy nos centraremos en las reales y posibles alternativas a ChatGPT ya que realizan funciones bastante similares. Cada una de ellas tiene su propio estilo y enfoque, lo que crea experiencias totalmente diferentes.

Algunos destacan por su capacidad de respuesta rápida y precisión en la información, mientras que otros se enfocan en ofrecer una interacción más conversacional y de “tú a tú”. Explorar estas opciones desde luego permite apreciar la diversidad y el potencial de la tecnología de los asistentes de lenguaje más allá de ChatGPT, aunque mi opinión queda clara al final del artículo.

Alternativas a ChatGPT: ¿conseguirán superar a este chatbot?

Bing

Microsoft anunció Bing Chat el 7 de febrero y, poco después de su lanzamiento, los usuarios descubrieron que se podía convencer a la herramienta para que dijese cosas poco lícitas. No mucho después, Microsoft redujo drásticamente toda esta problemática de Bing Chat al imponer límites estrictos sobre la duración de las conversaciones, evitando así las alucinaciones del chatbot.

Desde entonces, la compañía ha estado experimentando con numerosas formas y mejoras para recuperar algo de la esencia y calidad en este chatbot para aquellos que así lo querían, pero también permitiendo que otros usuarios busquen respuestas más precisas. Esto resultó en la nueva interfaz de "estilo de conversación" de 3 opciones que estuvimos también probando.

En pocas palabras, se ha diseñado para ofrecer resultados de búsqueda más rápidos, más precisos y más eficientes y utiliza el conocimiento y los avances de sus predecesores para proporcionar los mejores resultados posibles a los usuarios convirtiéndose en una clara opción de uso.

Bard

Tras la popularidad de ChatGPT, muchos usuarios esperaban con entusiasmo la respuesta de Google al fenómeno de los chatbots de inteligencia artificial. Si bien la compañía inicialmente se abstuvo de lanzar una IA en formato chatbot, citando preocupaciones sobre un posible uso indebido, la compañía cedió a la demanda y anunció el desarrollo de un servicio experimental y conversacional llamado Google Bard.

Como ya sabes, sus comienzos fueron convulsos, aunque reciente han lanzado grandes mejoras que han vuelto a poner sobre la mesa la posibilidad de hacer frente a ChatGPT. 

La compañía ya ha confirmado que ahora está disponible ‘para todos’ y se ha actualizado con mejoras como matemáticas avanzadas, habilidades de razonamiento, capacidades de codificación y ahora es compatible con más de 180 países y territorios. Bard también será más visual, lo que permitirá a los usuarios incluir imágenes con texto en sus charlas.

Por el momento toca esperar e ir viendo poco a poco cómo estas mejoras llegan a la UE, donde aún no está disponible y comprobar cómo funciona en español. Es evidente que ha dado un gran salto hacia adelante con enormes ventajas pero aún le queda mucho camino por recorrer dada su juventud.

AutoGPT

AutoGPT ha ganado gran popularidad aunque es cierto que como ha subido ha bajado. El principal problema es su uso, ya que cambia radicalmente la relación entre la IA y el usuario final a la que estamos ya acostumbrados.

Este es un sistema complejo que depende de múltiples componentes. Se conecta a Internet para recuperar información y datos específicos, presenta administración de memoria a corto y largo plazo, utiliza GPT-4 para la generación de texto más avanzada de OpenAI y GPT-3.5 para almacenamiento de archivos, pero todo se une para producir resultados impresionantes.

El problema es que es realmente complejo su uso y para el día a día no resulta del todo útil como puede ser ChatGPT o incluso Bard o Bing. Tener AutoGPT en tu ordenador no es tarea fácil y quizá —a lo mejor eres un erudito con la programación— necesites a alguien que entienda de Python, ya que para usar AutoGPT, debe tener Python 3.8 o superior. 

También debes tener una clave de API de OpenAI válida, que deberás obtener y una clave de API de Pinecone. El complemento de texto a voz también requiere una API de ElevenLabs. Como ves, nada sencillo.

ChatSonic

Por último, ChatSonic es una alternativa relativamente nueva y bastante sorprendente a ChatGPT que ha ganado mucha popularidad. Está construido sobre ChatGPT —su interfaz es muy similar— y hereda su gran potencial, pero también tiene características adicionales y un conocimiento más amplio porque puede acceder a Internet.

Este chatbot de IA también recuerda las conversaciones y las usa para continuar el flujo e incluso tiene 16 personajes diferentes, bastante chulos para aquellos que quieren conversar con un toque personalizado.

Una de las principales ventajas de ChatSonic sobre ChatGPT es que permite a los usuarios hablar con la IA usando tu micrófono y puedes responder por voz si lo deseas. Después de una conversación, los usuarios pueden compartir las respuestas a través de enlaces o documentos de Word y PDF.

Además del texto, ChatSonic también tiene un generador de imágenes incorporado que crea imágenes bastante chulas a partir de las indicaciones que se le dan. 

Si bien no es gratuito, proporciona 25 generaciones gratuitas al día, después de lo cual los usuarios pueden emplear su saldo de palabras de Writesonic para generar más imágenes —al igual que con AutoGPT—. Este es quizá su único pero gran problema.

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Ahora que ya conoces algunas alternativas —aunque existen muchas más, pero la mayoría son directamente incomparables— debo confesar que sigo siendo fiel a ChatGPT, aunque las cosas podrían cambiar sobre todo con respecto a Bard.

Si bien es emocionante explorar nuevas opciones y probar otros chatbots con enfoques y funciones únicas, hasta ahora ninguno ha logrado superar la versatilidad y calidad de ChatGPT en mi opinión, aunque es cierto que no dispongo de la versión ChatGPT Plus con la que definitivamente se marca la diferencia.

Por supuesto, mi preferencia actual por ChatGPT se basa en mi experiencia personal y en los beneficios que he obtenido de su uso. Sin embargo, reconozco que el panorama de los asistentes de lenguaje está en constante cambio y que las sorpresas pueden surgir en cualquier momento. 

El tiempo siempre es un factor determinante y la competencia en este campo avanza rápidamente. Es posible que algunas de estas alternativas emergentes logren perfeccionar sus características y superar a ChatGPT en el futuro, no me cabe duda. Aunque como siempre, prefiero que todos estos chatbots se complementen en lugar de que se sustituyan.