Estudiar mejor y más rápido, incrementando al máximo la capacidad mnemotécnica, el deseo de todo estudiante. Y si eres estudiante universitario, sabrás muy bien de qué te hablamos si estás preparando tus exámenes de enero. Si bien es cierto que se puede encontrar mucha literatura sobre las formas más rápidas de aprender, últimamente hay un movimiento que está cobrando mucha fuerza y es el denominado "efecto de prueba".

Si quieres conocer la síntesis de este método vendría a ser: En lugar de leer y releer una lista de palabras, por ejemplo, leerla y tratar de repetirla por ti mismo sin mirar. Así, repetidas veces, aproximadamente cinco. Se trata, pues, de poner la memoria a funcionar. Este método ya era sugerido por el cantante de ópera Gabriel Wyner en su libro Fluent Forever.

Si nos referimos a un estudio realizado en 2003, y que viene reforzado por otros estudios más recientes, se pidió a un grupo de alumnos que estudiase una lista de 40 palabras. Los primeros la leyeron una vez y después hicieron 4 intentos de reproducirla. Los segundos, pudieron revisar esta lista de 40 palabras 5 veces.

Ambos grupos hicieron dos exámenes, uno 5 minutos después y otro una semana más tarde. Mientras que los segundos lo hicieron excelentemente en una prueba a los 5 minutos de haber estudiado, los segundos lo hicieron muchísimo mejor en la prueba realizada una semana más tarde.

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Según lo anterior se desprende que si lo que buscas es incrementar tu capacidad mnemotécnica en el largo plazo lo mejor es que leas una vez el texto, la lista de palabras o lo que sea y que trates por ti mismo unas cuantas veces de reproducir lo que leíste.

Puedes combinar esta técnica con la comprobación inmediata de si lo que has escrito por ti mismo como resultado de lo que leíste es correcto o no. Según los más recientes estudios esto resulta muy efectivo para incrementar la memoria todavía más.

[Fuente: Science Alert]