Elegir el portátil perfecto para cada periodo educativo puede ser complicado, pero no imposible. Lo importante es tener claro el camino a elegir y las necesidades de cada rama de estudio. No todos los usuarios necesitan lo mismo y, es por ello, que siempre hay que decidir teniendo en cuenta estas variables para así tomar la decisión correcta.

Y, como la vuelta al cole ya está aquí, por lo menos que la tecnología nos lo ponga fácil. Intel presenta sus procesadores de 11ª generación y que están enfocados a entornos educativos para que los estudiantes no tengan que preocuparse del rendimiento y la versatilidad. En este vídeo puedes ver todas sus ventajas y cómo te pueden ayudar.

Los núcleos e hilos importan

Encontrar un portátil a la altura de las circunstancias pasa por conocer el procesador que tiene en su interior. Los nuevos Intel Core de 11ª Generación estrenan una nueva arquitectura que llega para ofrecer un mejor consumo energético, mayor potencia y, sobre todo, modos turbo para hacer frente a cualquier tipo de tarea compleja.

Los Intel Core i5 de 11ª Generación son la opción perfecta para estudiantes cuya principal tarea sea el manejo de datos. Enfrentarse a tablas de Excel o mantener decenas de pestañas abiertas en Chrome no supondrá ningún tipo de problema para este procesador, ningún programa de ofimática pondrá plantarle cara.

En el caso de estudios audiovisuales o ingenierías, la apuesta segura son los Intel Core i7 de 11ª Generación. Estos procesadores son la punta de lanza de la nueva generación de Intel y están hechos para ejecutar programas pesados sin despeinarse. El extra de potencia sirve para poder hacer ediciones de último momento y no desesperarse mientras se exportan.

Nuevas gráficas para darlo todo

La nueva gráfica integrada de los procesadores Intel Core de 11ª Generación es la Intel Iris Xe. Intel ha diseñado por completo y desde cero la nueva arquitectura gráfica. La Intel Iris Xe está hecha para sacarle el mayor provecho al apartado gráfico y a la creatividad de los estudiantes. No habrá problema a la hora de procesar o reproducir contenidos inmersivos y con altas resoluciones.

Se podría pensar que las nuevas gráficas solo cobran importancia en estudios específicos, pero estas nuevas gráficas cumplen una labor importante a la hora de conectar monitores externos para estudiar cómodamente. La posibilidad de ampliar la pantalla o tener más de una mientras se estudia depende de la colaboración entre GPU y CPU.

Es por ello que Intel ha puesto tanto empeño en el desarrollo de su nueva generación de procesadores y de gráficas integradas. Se pueden conectar hasta cuatro pantallas y con resoluciones 4K en todas ellas. Además, las Intel Iris Xe utilizan la inteligencia artificial para adaptar los recursos necesarios a las condiciones de cada estudiante.

Las nuevas Intel Iris Xe suponen un planteamiento diferente y el inicio de un nuevo camino para el procesamiento gráfico por parte de Intel. Al formar parte del procesador son un aliciente a la hora de elegir un portátil con procesador Intel Core de 11ª Generación. A grandes rasgos, esta combinación es lo que un portátil necesita.

Eficiencia energética para no quedarse sin batería

Algo muy importante es que el equipo cuente con una autonomía que permite utilizarlo en cualquier momento y situación. Además, también cobra relevancia que a la hora de encenderlo el tiempo de respuesta sea mínimo. Intel se ha asegurado de que todo esto se cumpla.

La plataforma Intel Evo se encarga de verificar que los equipos con procesadores Intel Core de 11ª Generación están a la altura de las situaciones. Esta etiqueta indica que a la hora de encender el equipo la reactivación sea instantánea, el portátil saldrá del estado de suspensión y estará listo para empezar a estudiar en menos de un segundo.

Además, Intel Evo también se asegura de que la batería del portátil sea de larga duración. Esto hace que la preocupación a la hora de cargar el equipo durante las jornadas en la biblioteca o en los seminarios se esfume. Y si hiciese falta cargar el portátil también añade una mayor velocidad de carga para no pasar tanto tiempo conectado al enchufe.

Estabilidad de conexiones inalámbricas

Los procesadores Intel Core de 11ª Generación llegan con mejoras tanto en conectividad inalámbrica como el WiFi o Bluetooth como en las conexiones por cable. Las redes WiFi de los colegios, institutos o universidades no son todo lo estables o veloces que deberían ser. Eso sí, los equipos con procesadores de nueva generación cuentan con WiFi 6.

Al tener el último estándar en cuanto a conexión para la navegación por la red hace que las conexiones a redes inalámbricas sean más rápidas además de fiables. Las mejoras, como hemos dicho, llegan también en las conexiones por cable. Los portátiles con los procesadores Intel Core de 11ª Generación cuentan con componentes avanzados como puertos Thunderbolt 4.

Incluir estos puertos en ordenadores portátiles permite que se puedan conectar varias pantallas al portátil, además de ofrecer velocidades de transferencia de datos casi instantáneas. En definitiva, apostar por los Intel Core de 11ª Generación es la mejor decisión. Tanto si son los Core i5 para estudios más teóricos o los Core i7 para titulaciones donde se necesite un extra de potencia para programar, editar o crear contenido.