Diseñan micromotores para curar las infecciones en el estómago
Un equipo de nanoingenieros de la Universidad de California en San Diego (Estados Unidos) ha efectuado el primer ensayo exitoso para tratar una infección bacteriana en el estómago con micromotores, un novedoso sistema para administrar fármacos a través de vehículos autopropulsados diminutos.
Muchas de las enfermedades del estómago y el tracto gastrointestinal requieren el tratamiento con medicamentos que son sensibles a los ácidos, como los antibióticos o los productos farmacéuticos basados en proteínas, lo que impide que sean administrados oralmente. Por este motivo, los pacientes acompañan el tratamiento con el consumo de otras sustancias, llamadas inhibidores de bomba de protones, que suprimen la producción de ácido gástrico. No obstante, cuando se toman durante mucho tiempo o en dosis elevadas, los inhibidores pueden causar efectos secundarios adversos, como dolores de cabeza, diarrea y fatiga, e incluso ansiedad o depresión.
Para evitar este problema, los investigadores han diseñado estos micromotores, que son vehículos que tienen la anchura de la mitad de un pelo humano con la capacidad de nadar rápidamente a través del estómago. Su composición incluye un mecanismo que les permite neutralizar los ácidos gástricos protegiendo el fármaco, para después lanzar su carga cuando se encuentren en un entorno con el nivel deseado de pH. "El tratamiento de un solo paso con estos micromotores combina la neutralización del ácido y la acción terapéutica", asegura Berta Esteban-Fernández de Ávila, co-primera autora del estudio.
Cada micromotor está compuesto por varias capas: un núcleo esférico de magnesio recubierto con una capa protectora de dióxido de titanio, una capa del antibiótico claritromicina, y por último una capa externa de polímero cargado positivamente para que los motores se adhieran a la pared del estómago. Obtienen la energía para propulsarse del propio ácido estomacal, y cuando cumplen su función de disuelven gracias a sus materiales biodegradables.
El equipo probó la eficacia de los micromotores para tratar enfermedades estomacales con ratones de laboratorio, y señala que sus resultados son prometedores. El estudio todavía se encuentra en una etapa temprana, por lo que tendrán que seguir trabajando en el sistema todavía durante un tiempo antes de que podamos ver su aplicación en la práctica clínica.
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