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Vive como un indigente durante 21 años, ahorrando para jubilarse a los 45

Media vida viviendo voluntariamente en la pobreza extrema, para pasar la otra media sin agobios. ¿Merece la pena?

Vive como un indigente durante 21 años, ahorrando para jubilarse a los 45 años

絶対仕事辞めるマン / X

Un japonés anónimo de 45 años, lleva tiempo compartiendo en Twitter (ahora X), su voluntaria vida de indigente, con el objetivo de poder jubilarse este mismo año. Muchos lo ven como una búsqueda de la libertad. Otros, como una juventud desperdiciada.

Según ha contado él mismo en X durante los últimos años, con apenas 24 años obtuvo un empleo bien pagado, unos 30.000 euros al año, pero que le generaba mucho estrés, y le exigía trabajar hasta altas hora de la noche.

Podría haber buscado otro trabajo, pero tomó una decisión bastante chocante: viviría como un indigente, ahorrando al máximo, para jubilarse a los 45 años.

Juventud pobre, madurez resuelta

Cuando un japonés se pone un objetivo, es capaz de realizar sacrificios extremos para conseguirlo. Hay pocas culturas más constantes que la suya.

Con apenas 24 años, abandonó su piso de alquiler y en su lugar alquiló una habitación barata en un piso compartido, con una renta de 184 euros al mes. Ha vivido dos décadas en la misma habitación.

La sala apenas tiene una estera, y en lugar de muebles emplea cajas de cartón, como puedes ver en esta imagen de su cuenta de Twitter, en donde se identifica como "El hombre que alcanzará el retiro":

En los calurosos y húmedos veranos japoneses no tiene aire acondicionado, y en los duros inviernos no tiene calefacción: se calienta haciendo ejercicio, o con mantas.

Tampoco tiene pareja ni hijos, porque eso es un gasto inasumible. No se va de vacaciones, ni se permite ningún lujo. Su única distracción son los manga que obtiene gratis de una biblioteca, o ver películas en la tele. Sus favoritas son las carcelarias, porque él mismo siente que está viviendo como un prisionero.

Al la hora de comer, compra las comidas más baratas que venden, y siempre usa cupones. Se alimenta prácticamente de arroz cocido, pescado barato y vegetales. Algún día ha llegado a sobrevivir tomando solo una bebida energética. Eso sí, toma vitaminas y minerales para suplir sus carencias alimenticias.

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Estos días, este japonés con voluntad de hierro ha sido noticia porque ha anunciado en X que ya ha ahorrado 132 millones de yenes, unos 810.000 euros, que era la cantidad que había previsto para poder jubilarse, y no tener que trabajar más. Ha tardado 20 años y 10 meses, viviendo casi en la indigencia.

Debería estar feliz, pero le ha surgido un problema inesperado: el yen se ha depreciado tanto en 2024 que la inflación se ha disparado, y 132 millones de yenes ya no son suficientes. Así que va a tener que ahorrar un poco más.

Como era de esperar, en las redes sociales japonesas lo ven con división de opiniones. Unos creen que es una idea inteligente, solo al alcance de una persona con voluntad de hierro. Otros piensan que lo único que ha conseguido es desperdiciar su juventud.

Posiblemente, el consejo más práctico es el de un tuitero que asegura que lo más sabio hubiese sido invertir en oro, que siempre sube de precio y no se devalúa. Así habría conseguido su objetivo mucho antes.

21 años de pobreza extrema voluntaria, para jubilarse a los 45 años. ¿Merece la pena?

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Etiquetas: Alimentación, Viral, Japón, Curiosidades