Los nuevos procesadores de PC sólo funcionarán con Windows 10
Continúa el doloroso y complejo proceso de convertir a Windows 10 en un servicio, que deje atrás el concepto de programa o sistema operativo. Microsoft quiere hacer en los ordenadores lo que iOS y Android han llevado a cabo en los dispositivos móviles.
Y para ello las nuevas CPUs de Intel, AMD y Qualcomm que saldrán en 2016 sólo funcionarán con Windows 10. Algunos modelos ya existentes también dejarán de recibir actualizaciones de Windows 7 y Windows 8, y sólo se actualizarán si se usan con el nuevo sistema.
Windows 10 va a ser el último sistema operativo de Microsoft, entendido como el concepto de comprar un programa e instalarlo en tu ordenador, para evolucionar posteriormente en "oleadas" o service packs.
El sistema operativo Windows 10 se va a convertir en el servicio Windows, un software que no añadirá más numeraciones y que se irá actualizando eternamente, de forma continua.
Para que esto sea posible es necesario que los más de 1000 millones de ordenadores PC abandonen los viejos sistemas Windows XP, Vista, 7 y 8, y se pasen a Windows 10. Microsoft facilita la transición ofreciendo Windows 10 de forma gratuita a los usuarios de Windows 7 y Windows 8. Y aunque el proceso de actualización va bien, pues más de 200 millones de usuarios ya tienenWindows 10, no va todo lo rápido que a Microsoft le gustaría. Por eso va a implementar medidas adicionales que animen a los usuarios a dar el salto a Windows 10.
En un post publicado en el blog oficial de Windows, Microsoft anuncia que los nuevos procesadores Kaby Lake de Intel, los nuevos 8996 de Qualcomm, y los nuevos Bristol Bridge de AMD, sólo funcionarán con Windows 10. Más concretamente, dependiendo de los modelos puede que alguno de ellos sí sea capaz de arrancar Windows 7 o Windows 8, pero lo harán sin drivers actualizados.
Esta medida ha sido aplaudida por los fabricantes de ordenadores, placas base y procesadores, que ya no tendrán que preocuparse por desarrollar drivers y software para soportar los viejos sistemas operativos. Es lo mismo que ocurre con los dispositivos iOS o Android nuevos, que sólo funcionan con la versión de iOS o Android actual, pero no con las versiones viejas.
Microsoft ha ido un paso más allá y también anuncia que algunos procesadores Intel actuales de la gama Skylake dejarán de actualizarse en Windows 7 y Windows 8a partir de julio de 2017. Los usuarios tienen 18 meses para dar el salto a Windows 10, o perder el soporte. En breve publicarán la lista de las CPU Skylake afectadas.
Para el resto de procesadores antiguos u otras gamas Windows 7 se seguirá actualizando hasta el 14 de enero de 2020, y Windows 8 hasta el 10 de enero del 2023.
La compañía de Redmond justifica estas medidas porque los procesadores modernos están diseñados para usar las nuevas funciones de Windows 10, y con este sistema operativo su rendimiento aumenta hasta un 600%, mientras que el consumo se reduce hasta una tercera parte.
Así que ya sabes, a partir de este año si compras un ordenador con un procesador nuevo sólo funcionará correctamente si usas Windows 10, adoptando la misma política que los móviles y las tablets. Por supuesto, esta limitación se refiere a los SO de Microsoft. Ni que decir tiene, cualquier CPU nueva funcionará sin problemas con Linux o cualquier otro sistema.
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