Prepárate para el 4K sin tirar el dinero con Kensington

Cada vez más plataformas y distribuidoras ofrecen sus películas y series en resolución 4K. Videoclubs online como el recién llegado Netflix están generando cada vez más contenido, y llegará un día en el que el que esta resolución se convierta en un estándar de mercado. 

Para poder estar preparados, lo mejor que podemos hacer es contar con el hardware adecuado. Por lo general, esto puede significar adquirir dispositivos que se nos salen un poco del presupuesto, como televisores o reproductores de alta resolución. El problema es que si no contamos con las conexiones adecuadas, aunque nuestro reproductor y televisión admitan 4K, la alta definición se perderá por el camino. 

Nos explicamos: si nosotros reproducirmos un contenido 4K en nuestro ordenador, y lo enviamos a nuestro televisor 4K con un adaptadorque no esté preparado, no lo veremos en esa definición y nuestros esfuerzos serán en vano. 

Aquí es donde los adaptadores entran en juego. Hay muchas opciones en el mercado, pero muy pocas garantizan que estamos recibiendo la resolución que buscamos, por eso siempre es mejor confiar en primeras marcas. 

Los mejores contenidos de Netflix ya están disponibles en 4K

En este caso os remitimos a Kensington. La compañía lleva tiempo apostando fuerte por el formato 4K, y ha estudiado mucho el cambio de adaptadores. Y son dispositivos que nos servirán tanto en Windows como en Mac. Para este primer sistema operativo os recomendamos el VU4000, un adaptador sencillo pero efectivo para pasar de USB 3.0 a HDMI. Una opción muy buena si nuestro MacBook no cuenta con esta salida. 

Además, también es una forma muy práctica de sacar los contenidos 4K de nuestro ordenador Windows. Por si fuera poco, Kensington diseña sus adaptadores de tal forma que los usuarios no tengan que pasar tediosos minutos de instalaciones de drivers y demás inconvenientes. 

Y si sois más de Mac la mejor opción es el VM4000, un adaptador que os permitirá pasar del puerto Thunderbolt a HDMI. Así podréis mantener los puertos USB libres y aprovechar el potencial de vuestro ordenador completamente, sobre todo si no contáis con USB 3.0.