La Guardia Civil comparte las señales que podrían indicar si tu casa es un objetivo para los ladrones

Las casas cerradas o deshabitadas son un objetivo fácil para muchos ladrones. No suelen estar vigiladas y puede pasar mucho tiempo hasta que el propietario se percata del robo y avisa a la policía, pero hay formas de prevenir estos robos. 

Antes de entrar a robar en un domicilio los delincuentes realizan un estudio del terreno, buscan edificios con pisos que estén deshabitados. Es posible que la persona esté de viaje por un largo tiempo o se haya mudado y todavía no se ha encontrado nuevo inquilino. 

Los ladrones suelen marcar estas casas con pequeñas señales que ayudan a detectar si la casa lleva tiempo vacía o si tiene un inquilino que ha regresado y podría estar dentro en el momento del robo. Así lo ha explicado la Guardia Civil en un mensaje en Twitter. 

Un pequeño plástico o papel colocado en la ranura de la puerta puede ser una señal clara de que tu casa está siendo vigilada por ladrones. Al abrir la puerta el papel cae al suelo, seguramente sin que el inquilino se de cuenta, y avisa a los ladrones que esa casa está ocupada. 

Otra opción, en el caso de las cerraduras de ojo amplio, es meter trocitos de papel dentro. La técnica es muy similar, al llegar el dueño e introducir la llave, las bolitas caen al suelo y cuando vuelven los ladrones sabrán que alguien ha entrado.

Si detectamos cualquiera de estas técnicas no debemos pensar que estamos a salvo por el hecho de tirar las marcas al suelo. Significa que nuestra casa y nuestros movimiento están vigilados y tarde o temprano podemos ser víctimas de un robo o incluso de un ataque violento. Lo más aconsejable es llamar al 062 y pedir ayuda y consejo sobre cómo proceder.