Los drones se han convertido en una herramienta de gran utilidad para el control de las carreteras, su posición elevada y la facilidad para transportarlos de un lugar a otro permiten vigilar un tramo diferente cada día y conseguir imágenes tan claras como estas. 

En una pequeña carretera comarcal de dos sentidos circulan turismos, furgonetas, camiones y ciclistas. Las normas de circulación dejan claro cómo deben proceder estos vehículos en cada circunstancia, pero es frecuente que los conductores se olviden de ello e infrinjan las normas poniendo en riesgo sus vidas y las del resto.

La Dirección General de Tráfico ha mostrado un video grabado con dron en el que suceden varias infracciones y ha preguntado al resto de ciudadanos a través de las redes sociales si sabrían detectar esos errores. ¿Quién está circulando respetando las normas y quién no?

Se muestran dos escenas, en la primera se ven involucrados dos vehículos particulares y en la segunda, vemos dos ciclistas y un coche circulando en una dirección mientras otros tres coches avanzan en dirección contraria. En ambas escenas los protagonistas se libran de sufrir un accidente a pesar de no estar circulando según las normas y arriesgarse con una maniobra peligrosa.

Consultando los comentarios que acompañan a este tuit parece que la atención se ha centrado principalmente en los ciclistas creando un debate entre usuarios que los culpan de ir en paralelo, mientras otros defienden su actitud. La DGT lo tiene más claro y da la respuesta correcta en el siguiente tuit. 

En la primera escena, el segundo vehículo no respeta la distancia de seguridad necesaria con el coche que lleva delante. Si el primer coche se detuviera de forma abrupta, el de detrás tendría dificultades para esquivar el golpe. 

Por otro lado, en la segunda escena los ciclistas pueden circular en paralelo (de 2 en 2) siempre que no provoquen retenciones en la carretera y haya buena visibilidad. Sin embargo, para adelantarles, el coche rojo no ha señalizado con el intermitente su maniobra y no ha esperado a que pasaran los coches del carril contrario obligándoles a echarse en el arcén para esquivarle.