Honda recula y vuelve a los botones de toda la vida dentro de sus coches en lugar de controles táctiles
Los coches con una pantalla gigantesca son muy bonitos y dan la sensación de ser "de tecnología punta". Sin embargo, donde en otros ámbitos una pantalla enorme o con todos los controles integrados es ideal, en un vehículo... no tanto. Es más, Honda ha tenido que dar marcha atrás y añadir botones en el Honda Civic de 2020 que no estaban en el Civic de 2017.
La imagen que abre este artículo corresponde al centro de mandos del Civic 2020, el nuevo modelo que se acaba de presentar y que, como veis, mantiene una pantalla desde la que se controlan diferentes elementos del vehículo como la radio, el navegador o el teléfono.
Además, tiene una serie de pestañas en el lateral izquierdo, una rueda para controlar el volumen y los mandos de climatización, subir y bajar temperatura justo debajo, todo en botones físicos. A continuación, echad un vistazo al panel de mandos del Civic de generación anterior:
Como se puede ver, es muy similar, pero no están los controles de subir/bajar temperatura, los botones físicos del panel o la rueda de volumen y encendido del sistema de audio. Y sí, los que seáis conductores ya sabéis por qué es importante tener estos mandos físicos.
Cuando estamos al volante, las distracciones son fatales y lo mejor es ir de forma intuitiva a tocar el botón que queremos sin desviar la mirada de la carretera. Eso sí, las grandes pantallas son imparables.
Un ejemplo es el nuevo Seat León, con un panel en el que todo es táctil, pero también los Tesla en los que todos los parámetros y controles del coche están en pantallas (sea la que tenemos sobre el volante o la gigantesca pantalla central).
Volviendo al Civic de 2020, el nuevo modelo es compatible con Apple CarPlay, así como con Android Auto. Cuenta con asientos automatizados con ocho posiciones y dos configuraciones de gasolina: tres cilindros 1.0 VTEC Turbo de 126 CV y 200 Nm de par y el cuatro cilindros 1.5 VTEC Turbo de 182 CV.
El precio del Civic 2020 arranca en los 23.900 euros para el modelo 1.0 VTEC y en los 31.550 para el modelo 1.5. Y, dicho esto, tarde o temprano veremos coches sin mandos, aunque esperemos que, para cuando eso suceda, ya vayan "solos".
Conoce cómo trabajamos en ComputerHoy.