A la hora de comenzar a usar una aplicación debemos dar una serie de permisos para que esa app utilice los sensores de nuestro smartphone. Acceso a la cámara, al calendario, a los contactos y a nuestra localización entre otras, pero ¿eres consciente de todas las apps a las que les has dado estos permisos?

Es normal encontrarse con aplicaciones a las que hemos dado más permisos de lo que nos gustaría, las prisas o la falta de atención nos traicionan, o simplemente dimos el permiso hace mucho tiempo y  ya no lo recordamos Existe una forma sencilla de revisar este aspecto en Android y actualizar la lista de apps que saben donde te encuentras.

Lo primero que debes hacer es entrar en los ajustes de tu teléfono, por regla se pueden encontrar en el cajón de aplicaciones o desplegando el menú superior de la pantalla, allí está el engranaje que simboliza los ajustes en todos los teléfonos Android. Una vez dentro, busca la sección de Privacidad.

Aquí las opciones varían según el modelo o capa de personalización que haya instalado la marca de tu smartphone. Lo más habitual es que exista una sección que se llame Gestor de permisos o Administrador de permisos, busca una opción similar en el menú de Privacidad. 

Ten en cuenta que si usas la barra de búsqueda de los ajustes desde el principio, puedes acceder más rápido, sin dedicar tiempo buscando entre los distintos menús. Escribe permisos y llegarás rápido a este apartado. Aquí, verás una selección de los servicios y sensores o elementos del móvil para los que las aplicaciones deben pedir permiso, como la Ubicación o Localización. 

Pincha en el sensor que te interese y accederás a una lista con todas las aplicaciones que pueden o no ver esos datos para su funcionamiento. Hay 3 secciones, las que tiene permiso para consultar tu localización en todo momento, las que sólo pueden usarlo cuando están siendo utilizadas o las que no tienen permiso nunca pero lo piden.

Google Maps, por ejemplo, necesita estar siempre conectado para poder compartir tu ubicación con familiares o amigos. Por eso cuando intentas cambiar su configuración te advierte que algunas funciones básicas dejen de funcionar. Tú decides si correr ese riesgo y sólo permitirle acceso a tu ubicación cuando la estés usando. 

Así puedes operar con el resto de aplicaciones y permisos, quitarlos o dárselos según los vayas necesitando y comprobar que las últimas aplicaciones que has instalando no registran más datos de los necesarios o razonables.