Google ha sido el gran impulsor de este nuevo estándar de mensajería que se postula como el sustituto definitivo de los SMS y la competencia de las aplicaciones de mensajería como WhatsApp y Telegram. Tras años de acuerdos con las operadoras esta tecnología está ya disponible, pero le faltaba un detalle.

Una de las grandes quejas que acarreaba el estándar RCS era su seguridad y privacidad. Para solucionarlo, Google ha implantado el sistema de protección de cifrado de extremo a extremo en sus RCS, al igual que los mensajes de WhatsApp, para que nadie pueda leer nuestras conversaciones privadas.

El cifrado de extremo a extremo, cifrar cada mensaje y lo protege de miradas ajenas. Ni siquiera los empleados de WhatsApp o los de Facebook pueden tener acceso a los mensajes que tú mandas y recibes en WhatsApp. Para ello, se emite un código por cada nuevo mensaje que mandamos y que sólo se puede descifrar en el dispositivo de la persona que lo manda y en el de la persona que lo recibe, por eso se llama de extremo a extremo.

A través de la aplicación Android Messages, todos los usuarios de un móvil Android y cuya operadora lo permita, pueden hacer uso de estos mensajes que no requieren de conexión a internet para funcionar, sino que utilizan la red telefónica. Google ha trabajado mucho para que este estándar estuviera accesible en todo el mundo y que la gran mayoría de operadoras lo implantarán en sus servicios. 

Ahora le ha tocado el turno a la seguridad, para que los usuarios confíen en que sus mensajes no quedarán expuestos. Aunque el cifrado de extremo a extremo puede aplicarse de formas diferentes, es una gran noticia para la privacidad de este nuevo estándar. El cifrado estará disponible, tras un largo periodo de despliegue, entre usuarios de Android Messages. Si la otra persona con la que hablamos usa Samsung Messages o un iPhone, los mensajes se siguen recibiendo correctamente, pero sin encriptación.

Los mensajes RCS tampoco están disponibles en todos los países, China o Rusia son algunos de los que no cuentan con esta función de mensajería, al no tener los servicios de Google en su territorio. Aún así, Google ya lleva bastante camino recorrido en su empeño por convertir la tecnología RCS en el nuevo sistema de mensajería con más popularidad.

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Los RCS tiene grandes ventajas, no consumen datos al no depender de internet, permiten enviar documentos, GIFs, fotos, mensajes, exactamente igual que el resto de aplicaciones de mensajería y se pueden transmitir a cualquier teléfono, independientemente de la app que se use o el modelo. Únicamente es necesario que la operadora que hayamos contratado ofrezca el uso de estos mensajes, al cual ya se han sumado bastantes empresas en todo el mundo. Habrá que esperar para comprobar si terminan de reemplazar al SMS y si le quitan terreno al todo poderoso WhatsApp.