Sony es una compañía que va a su 'bola'. Tienen una estrategia muy particular y me gusta decir que es la Nintendo de los smartphones, ya que parece que lo que hacen es competir contra ellos mismos sin mirar, muchas veces, las tendencias del mercado.

Es algo que vuelve a demostrar este Xperia 1 III que recibimos ayer y del que, tras pasar unas horas con él entre manos, nos ha dejado sensaciones muy positivas en unos aspectos y no tanto en otros. 

Lo que es innegable es que siempre nos encanta probar móviles de Sony porque tienen algo especial que, precisamente, los hace diferentes en un mercado en el que prácticamente todos los móviles se parecen muchísimo.

Antes del análisis del Sony Xperia 1 III queremos daros unas pinceladas de lo que nos encontramos con este tope de gama de Sony, un móvil que sorprende en cuanto lo sacamos de la caja.

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Galeria impresiones Sony Xperia 1 III (14 imágenes)

Un diseño que marca la diferencia

Y, evidentemente, lo primero que salta a la vista es el diseño. Se trata de un móvil enorme que cuenta con una altura de 165 mm. Está, así, a la par de otros móviles gigantes que hemos visto estos últimos meses como el Mi 11 Ultra -análisis- o el S21 Ultra -análisis-.

De hecho, en la mano parece más grande de lo que realmente es debido al formato tan alargado que tiene. La pantalla tiene un formato prácticamente único en el mercado (si no contamos otros Sony Xperia, claro) de 21:9, por lo que parece muy, muy alto, pero esto también hace que sea más estrechito.

Con sus 71 mm de anchura vamos a poder abarcar bien con el pulgar más o menos el 50% de la pantalla, y es un dato genial teniendo en cuenta el tamaño de 6,5" en este formato alargado. Se agarra muy bien y, como es complicado usarlo con una mano, tenemos una opción rápida para disminuir el tamaño utilizable del dash para controlarlo todo con un único dedo.

Ya que estamos con el frontal, debemos decir que tiene marcos. No muy pronunciados y simétricos dos a dos (los laterales entre ellos y el superior e inferior entre sí), pero están ahí. En el marco superior tenemos el auricular de llamadas que sirve como altavoz, así como la cámara frontal y un LED de notificaciones RGB, algo que prácticamente se había extinguido.

En el marco inferior tenemos el otro altavoz, que se mueve de la parte inferior a ese marco. Es una posición más cómoda para jugar y ver contenido, todo sea dicho. 

Así, en la parte inferior solo tenemos un micrófono y el USB-C. Y hay cositas que ya os están demostrando que Sony va a lo suyo, como esos marcos o el LED de notificaciones, pero además estamos ante un móvil premium con jack de 3,5 mm en la parte superior y una ranura de expansión y SIM que podemos sacar sin el 'pinchito'.

Esto es muy cómodo para creadores de contenido y parece que no compromete la certificación IP68 que tiene el terminal.

En el lateral derecho tenemos los botones de volumen, un botón de cámara (que tiene pulsación media para enfoque y total para hacer la foto) y dos botones algo hundidos: Google Assistant y bloqueo con huella dactilar.

No me gusta nada que el botón de bloqueo donde está el sensor capacitivo esté hundido, ya que en estas primeras horas he tardado más de la cuenta en encontrarlo. Todo es acostumbrarse, está claro, pero habría estado genial un botón al nivel del cuerpo.

La trasera es de cristal con acabado mate para que no se peguen las huellas y la cámara tiene un formato alargado. Es un móvil muy, muy elegante, eso está claro, y llama la atención tanto por su sobriedad como por ese factor de forma.

Panel 4K a 120 Hz y Snapdragon 888 para devorar contenido

El diseño está muy cuidado, pero si por algo destacan los Xperia es por la pantalla y aquí tenemos una OLED 4K con una resolución algo extraña de 3.840 x 1.644 píxeles que sorprende por la enorme densidad de píxeles: 613 ppp en todo momento.

No podemos elegir una resolución que no sea la 4K, así que vamos a tener un panel que se ve de escándalo en todo momento (y con un software muy pulido), calibrado para la UHD y HDR y, además, con 120 Hz.

En estas primeras horas, la experiencia con el Xperia 1 III a nivel de consumo de contenido (algunos juegos, redes y demás) ha sido perfecta y, de hecho, no se me ocurre un móvil mejor que este, en estos momentos, para consumir contenido.

Los colores no son tan vibrantes como en un Samsung tope de gama, por ejemplo, pero es esa aproximación de los iPhone de colores más 'realistas' con una gran densidad de pantalla que hace que los píxeles sean indistinguibles.

La sensibilidad es perfecta y sí, los contenidos que no sean 21:9 van a generar barras negras gruesas en los laterales y si los estiramos perderemos mucha información, pero cuando el vídeo está en el formato de la pantalla, es una auténtica delicia. 

De hacer que ese contenido cobre vida se encarga el SoC. Es el Snapdragon 888 con 12 GB de memoria RAM y es una bestia. Algo que me gusta de Sony es que meten poca mano en el sistema operativo, por lo que la experiencia de Android 11 es bastante limpia.

Simplemente tenemos algunas apps propias de Sony como la de las cámaras y podemos elegir qué software de los japoneses instalamos en la fase de configuración del móvil, algo que siempre está genial.

Discover va muy fluido, todo el móvil en general es un cohete y abrir apps, multitarea, pantalla partida, cualquier cosa, en general, va a una velocidad pasmosa. 

Hay que esperar a tener una mayor experiencia con el móvil, pero en estas primeras impresiones solo podemos alabar el trabajo de Sony junto a Google (como hacen Nokia o Motorola, por ejemplo).

3 cámaras con un telefoto muy inteligente

De las cámaras no podemos hablar demasiado debido a que nos gusta probar las cosas y las únicas fotos que he hecho ha sido en interior y desde el balcón. Os vamos a poner algunos ejemplos, pero en una semana, cuando tengamos el análisis, habrá muchísimos más ejemplos, evidentemente.

Antes de ver cómo se porta en interior, debo decir que la configuración me parece muy interesante al ser una triple cámara de 12 megapíxeles.

Sony tampoco compite en la batalla de los megapíxeles y aquí apuesta por un sensor principal que no es el más grande del mercado, pero que con esa cantidad de megapíxeles consigue un buen tamaño del propio píxel, algo que es muy importante en fotografía.

El sensor principal cuenta con estabilización óptica y enfoque PDAF Dual Pixel y me ha parecido muy rápido cuando las condiciones son buenas.

Por otro lado tenemos un gran angular de 12 megapíxeles y un telefoto, también de 12, que es un dos en uno. Y es que, es, por fin, un sistema de cámaras periscópico que mueve los elementos internos para dar un zoom equivalente a un 70 mm hasta un 105 milímetros.

Es decir, es un 2,9 x a un 4,4x que no pierde calidad durante todo el recorrido ya que el sensor es el mismo y se varía el zoom debido al movimiento de las lentes. Como en el objetivo zoom de una cámara, sin ir más lejos.

Y la aplicación también es totalmente distinta a la que solemos ver en Android. Todas las opciones esenciales y modos están a mano y cuenta con un menú superior que simula la rueda de modos de una cámara mirrorless y nos permite tirar en modo básico (el que más vamos a usar), pero también en un modo automático con un mayor de control de parámetros y en modos manuales, de programa y de preferencia a la velocidad.

Los más profesionales sacarán partido a este sistema y, además, tenemos una app alternativa para grabar vídeo de manera más profesional con la que nos 'pelearemos' de cara al análisis.

Lanzamiento y precio del Sony Xperia 1 III

Como decimos, en unos días os contaremos todas nuestras sensaciones en el análisis del Xperia 1 III, o Xperia 1 Mark III, pero de momento estas son nuestras impresiones iniciales.

Ahora bien, ¿cuándo estará disponible y a qué precio? Pues... no sabemos con seguridad la fecha de lanzamiento, pero el precio es de unos 1.300 euros.

 Sí, es carísimo y sí, es espectacular, pero como todos los Sony de altísima gama, no para todos los usuarios.

Lo que tenemos claro es que es un móvil de nicho y Sony ha echado el resto en prácticamente todos los apartados.