El Alzheimer es una de esas enfermedades que hay que coger a tiempo. Cuanto antes se diagnostique y se empiece a atajar, mejores serán los resultados y mejor responderá el paciente al tratamiento. Una herramienta que puede ser clave en el futuro para detectar de forma precoz el Alzheimer es la inteligencia artificial.

La IA ha explotado estos últimos dos años. Tras mucho tiempo en desarrollo, parece que los ordenadores, y el desarollo de las GPU con memoria de altísima velocidad, por fin han permitido que los investigadores evolucionen la inteligencia artificial a niveles que pueden ser útiles en diferentes aspectos de la vida. Hay muchos usos para la IA, que está hasta en nuestros teléfonos ayudándonos a sacar mejores fotos, y uno de ellos es detectar enfermedades y trastornos.

Ya había diferentes centros y estudios que estaban trabajando con la IA para detectar cáncer, infartos o neumonía, y también nos hicimos eco de investigaciones que afirmaban que la IA podría ayudar a detectar el Alzheimer 10 años antes que los métodos tradicionales.

Concretamente, los investigadores de la Universidad de California San Francisco han entrenado a una inteligencia artificial para que detecte los sutiles cambios metabólicos que se dan en el cerebro, lo que indica la posible aparición de Alzheimer. Estos cambios son tan pequeños en sus primeras etapas que los humanos no podemos reconocerlos de forma efectiva, algo de lo que sí es capaz una máquina.

La IA, gracias al machine learning, ''estudió'' más de 2.100 imágenes cerebrales pertenecientes a la base de datos de ADNI (la Iniciativa de Neuroimagen de la enfermedad de Alzheimer). Estas imágenes fueron tomadas de 1.002 pacientes, y el equipo de investigación y desarrollo hizo que la IA estudiara el 90% de los datos, poniéndose a prueba gracias a un completo algoritmo en el 10% restante. El resultado es que, de 40 pacientes, acertaron el 100%, lo que demuestra que la IA es capaz, gracias a este algoritmo, de detectar el Alzheimer.

Eso sí, los propios investigadores afirman que queda trabajo por hacer, ya que la IA, por sí sola, aún no es capaz de nada y se trata de una mera herramienta de apoyo al trabajo de los doctores. Lo que está claro es que puede ser una grandísima ayuda para detectar el Alzheimer en una fase temprana y comenzar, así, el tratamiento.