Toyota presenta el primer vehículo lunar tripulado, el Lunar Cruiser, con una autonomía de 10.000 Km

Estados Unidos sueña con volver a la Luna en 2024, y Japón pretende hacerlo al final de la década, en 2028 o 2029. Por supuesto, hablamos de enviar astronautas, no robots... El objetivo en ambos casos es establecer una base en la Luna, y para ello se necesitan vehículos tripulados. La Agencia de Exploración Aeroespacial de Japón (JAXA) y Toyota están trabajando juntos para desarrollar un vehículo lunar tripulado, que ya tiene nombre. Se llamará Lunar Cruiser.

Toyota asegura en la nota de prensa que han elegido este nombre porque es sencillo de recordar, y descriptivo. Pero también reconoce que era el nombre más obvio, teniendo en cuenta que uno de sus vehículos más populares es el Toyota Land Cruiser. Así que tiene todo el sentido que su variante lunar se llame... pues eso, el Lunar Cruiser.

Este vehículo funciona con células de energía de hidrógeno y paneles solares, y tiene una autonomía de... ¡10.000 Kilómetros! Literalmente casi puede dar una vuelta completa a la Luna, que tiene un diámetro de 10.921 Kilómetros. ¿Cómo es posible?

En primer lugar la gravedad en la Luna es más pequeña, y no existe resistencia del aire cuando te mueves, ya que no hay aire... Así que circular en la Luna requiere menos energía.

Además este Lunar Cruiser de Toyota no solo dispondrá de paneles solares enormes, como se ve en la fotografía superior. El Sol incide más fuerte en la Luna al no existir atmósfera, así que los paneles se pueden recargar más rápido. Y el vehículo también tiene la capacidad de transformar agua en hidrógeno para alimentar la célula de hidrógeno.

Gracias a todas estas tecnologías, alcanzará una increible autonomía de 10.000 Kilómetros. Y lo que es más importante: cero contaminación y residuos.

Pese a que es un vehículo mucho más grande que un camión, solo tendrá capacidad para dos personas, aunque puede llevar a cuatro personas en caso de emergencia.

Toyota tiene pensado tener listo el Lunar Cruiser a final de esta década. El proyecto requiere años de trabajo porque diseñar un vehículo lunar tripulado no tiene nada que ver con un coche terrestre.

Cerrado ya el diseño, como podemos ver en las fotos, ahora están en la fase de recrear los tamaños y el interior con sistemas de realidad virtual y  simulación, para que el vehículo tenga las proporciones correctas.

Dentro de una década, quizá lo veamos circulando sobre la superficie de nuestro satélite...