A pesar de su reciente disponibilidad, la actualización de mayo de Windows 10 ya está presente en un 11,4 % de los ordenadores con Windows, lo que es una buena noticia para Microsoft.

Uno de los principales problemas que existen en Windows es que las constantes actualizaciones hace que la fragmentación de versiones del sistema operativo estén a la orden del día, con un conjunto de usuarios con la actualización de abril del año pasado, otro grupo con la actualización de octubre de 2018 y ahora otro conjunto de usuarios con la actualización de mayo de 2019.

En todo caso según la firma de estadística AdDuplex, el uso de última versión de Windows 10 ha alcanzado el 11,4 % este mes de julio, experimentando casi el doble de crecimiento respecto al mes anterior.

De hecho la versión de Windows 10 que se lanzó este mes de mayo para la mayoría de los equipos ha conseguido ganar un 5 % de uso desde el pasado mes de junio, situándola en un 11,4 %. Curiosamente, todo este crecimiento procede de usuarios que anteriormente tenían la actualización de abril de 2018, y no de aquellos que tienen la actualización de octubre de 2018, bastante problemática.

Hasta ahora la versión de Windows más usada es la 1803, es decir, la de abril de 2018 que es la que menos fallos ha tenido. En cambio, la actualización de octubre de 2018, debido a la multitud de fallos que ostentaba, no llegó a todos los equipos.

25 trucos imprescindibles para Windows 10

En vista de la tendencia que está experimentando la actualización de mayo de 2019, se espera que todavía falten unos cuantos meses hasta que sea la versión más utilizada de Windows 10.

Como no tendremos ninguna gran actualización de Windows hasta primeros de 2020, Microsoft tiene tiempo suficiente para que esta actualización de mayo esté presente en un gran porcentaje de equipos.