La cita con Google ha terminado, el evento para desarrolladores anual en el que enseñan novedades técnicas y la nueva versión de Android también ha dejado noticias curiosas. Los rumores llevaban varias semanas llamando a la puerta, se comentaba que Samsung abandonaría Tizen en favor de Wear OS y hoy se ha confirmado esta decisión.

Wear OS es el sistema operativo de wearables, ya sea relojes o pulseras y siempre ha estado por detrás de la competencia. Esta competencia solía estar liderada por Samsung pues su sistema operativo para gadgets siempre ha sido de los mejores mientras que el de Google nunca ha terminado de despegar.

La alianza entre Samsung y Google pasa por intentar crear una plataforma que unifique en todos los aspectos el sistema operativo para wearables. Este intento pretende crear un sistema que tenga un rendimiento mucho mejor tanto a la hora de moverse entre las aplicaciones como a la hora de mantenerse encendido por largos periodos de tiempo.

Y, es que, la autonomía no es un punto fuerte de Wear, el nombre ha perdido el OS del final y ha quedado así, las mejoras que pretenden conseguir también pasan por optimizar la monitorización de las actividades físicas. En este último paso entra en juego Fitbit, pues también se suma a la ecuación para así prestar sus servicios a Google en el desarrollo de una mejor contabilización de las actividades.

Los cambios que ha recalcado Google durante su presentación también hacen referencia al diseño estético, pues ahora la interfaz tendrá accesos directos o “Tiles” que el usuario puede colocar a su antojo para crear una pantalla de inicio personalizable.

No hay todavía fecha para el lanzamiento de esto que tienen entre manos tanto Google como Samsung y Fitbit, lo único que han indicado es que los nuevos dispositivos de Samsung y Fitbit contarán el nuevo sistema operativo Wear. Por el momento solo queda esperar para ver los productos que lanzarán al mercado y comprobar si el comportamiento es mejor que con Tizen.