Las pantallas de los Samsung Galaxy Z Fold5 y Z Flip5 son la última novedad tecnológica. La compañía asiática lanzó hace apenas unos días sus nuevos dispositivos plegables, convirtiéndose en el nuevo estándar a vencer por parte del resto de empresas. En su interior se integra lo último en componentes y su exterior supone un reto en lo técnico debido al pliegue en su pantalla.

Pantallas plegables como innovación en los teléfonos. Tanto Samsung como Oppo, Xiaomi o Huawei han entrado al mercado de los móviles plegables. La meta ha sido siempre el poder ofrecer un dispositivo con una pantalla lo suficientemente resistente como para aguantar el uso cotidiano y las situaciones a las que están expuestos los paneles convencionales.

El clima como el peor enemigo de las pantallas plegables. Pese a los avances tecnológicos, todavía existen limitaciones en estos paneles capaces de hacer contorsionismo. Entre estas restricciones se encuentra las condiciones atmosféricas en las cuales se emplearán dispositivos como los Samsung Galaxy Z Fold5 y Flip5.

Plegados limitados en determinadas condiciones climáticas. Los datos ofrecidos por la compañía Bureau Veritas arrojan cifras interesantes en cómo influye la temperatura ambiente en el número de plegados que pueden realizar los Samsung Galaxy Z Fold5 y Flip5. Las condiciones meteorológicas abarcan desde los -20 hasta los 60 grados Celsius.

Las pantallas de los Samsung Galaxy Z Fold5 y Z Flip5 a merced del clima

Hasta 150.000 plegados a 60 grados Celsius. Resulta imposible pensar en un lugar en el que se pueda vivir a esa temperatura, pero en caso de que exista alguna persona dispuesta a tener un Samsung Galaxy Z Fold5 o Samsung Galaxy Z Flip5 a 60 grados Celsius ha de saber que la pantalla solo durará 41 plegados al día durante diez años.

La temperatura óptima son 25 grados Celsius. En este caso, las pantallas de estos dispositivos tendrán una duración de 200.000 plegados, lo que se traduce en que se podrá cerrar y abrir el dispositivo hasta 54 veces al día durante diez años. Eso sí, también hay datos acerca del peor clima para estas pantallas y se trata de zonas en las que se llegue a -20 grados Celsius que se traduce en solo 30.000 plegados.

La vida útil de estos dispositivos está íntegramente ligada al clima. Los datos están sobre la mesa, ahora solo queda que sean utilizados para alargar la vida de estos dispositivos y, por lo tanto, se mejore su uso en el día a día. Obviamente, esto no tiene nada que ver con el desarrollo por parte de Samsung y simplemente recae en las limitaciones de los materiales.